Atrapado en el tiempo

Gran película, sencilla en apariencia, pero que mantiene el ritmo en todo su metraje, con las dosis justas de humor, de un romanticismo que se va descubriendo, acompañado de unas geniales interpretaciones y una banda sonora que cumple su función. Muy buena comedia, que resiste bien el paso del tiempo, convirtiéndose en un clasico (por méritos própios). Gran Bill Murray, se le nota disfrutando en su papel y su evolución, y disfrutan todos los que están a su alrededor. Película que te deja una magnífica (y sincera) sonrisa.

“El infeliz que solo piensa en sí mismo, viviendo perderá su buen nombre; y muriendo por segunda vez, volverá al vil polvo del cual nació, sin ser llorado, ni honrado, ni alabado”.

Ésta frase que, Rita -la nueva reportera de la estación de noticias del canal 9 (WPBH)- atribuye a, Walter Scott, el célebre autor de novelas de aventuras como, “Rob Roy”, “Ivanhoe”, “El Pirata” y otras tantas, procura ella aplicarla al pronosticador del tiempo del mismo canal, Phil Connors, un tipo presuntuoso que, feo y sin ningún brillo, se cree ‘la vaca que más caga’ y osa subestimar a sus compañeros, Harry y la misma Rita, con quienes le ha tocado cubrir el “Groundhog Day” (Día de la Marmota) que se celebra, cada 2 de febrero, en una ciudad llamada Punx’sutawney.

Pero, parece ser que la vida también siente cierto aprecio por Phil… porque cuando despierta al segundo día –que debía ser el 3 de febrero- vuelve a ser el 2… y él vuelve a encontrarse exactamente con los mismos personajes del día anterior en los mismos lugares y, para su desgracia el día tercero también es el 2 de febrero… y el cuarto y el quinto día igual, y lo grandioso y aleccionador de esta originalísima historia –escrita por Danny Rubin, y trasladada a guion por él mismo, junto al director Harold Ramis-, es la manera como éstas circunstancias comienzan a despertar contrastantes sentimientos e ideas en nuestro personaje… y de pronto, nos va dando la magnífica lección que tiene el autoconocimiento y la compenetración con los demás, para poder llegar a ser los que Realmente somos.

Su vida es algo así como la rutina que cada ser humano vive; y cuando siempre sucede lo mismo, y ésto te produce hastío e infelicidad, es el deber del hombre comenzar a preguntarse: ¿Qué puedo cambiar? Porque, lo que la vida te dice cada mañana de rutina, es de este estilo: “Elige de nuevo”, “Mira de qué otra manera puedes hacerlo”, “Dale otra dinámica a tu vida”.

Lo que hará, Phil Connors, con su atribulada existencia, puedo afirmar que es ¡como para no perdérselo! porque define, de muy bella manera, lo que cada ser humano puede hacer con su propio destino y cómo es que podemos hacer de este mundo un maravilloso lugar para vivir.

Con una impecable dosificación de drama y comedia, <<ATRAPADO EN EL TIEMPO>>, puede presumir de una edición intachable; una fotografía bastante dinámica y en muy buenos tonos; y una banda sonora muy a tono con la narrativa.

Bill Murray, cumple muy bien con su rol de la recursiva “estrella” televisiva, pero confieso que, no sé por qué, me pasé deseando a ratos que su rol lo hubiese hecho, Ben Stiller, un actor que siempre me produce regocijo. Junto a Murray, Andie McDowell, reboza carisma como la confundida y muy dulce, Rita… pero, admitiendo que todo el reparto resulta magnífico, para mi gusto, las notas más altas se las llevan, Chris Elliot, el subestimado camarógrafo, Harry; Ned Tobolowsky como Ned, el vendedor de seguros; y Robin Duke, la sorprendida camarera, Doris.

Ésta es de esas películas que pasan como un cometa, pues, es tan agradable, y su historia tan creativa y original, que siempre estamos a la espera de qué va a ocurrir cuando el reloj despertador vuelva a marcar las 06:00.

¿Y si no hubiera un mañana? ¿Y si todo fuera un eterno presente que, tras cada reposo, nos convida a perfeccionarlo?

Título para Latinoamérica: HECHIZO DEL TIEMPO

Hacia 10 años que no veía la película, la última vez me sorprendió que, mi hijo que tenía 4 años, la miro con tanta atención que al otro día me dijo que la pusiera otra vez. Creo que la repetición de secuencias lo engancho en ese momento.

Diez años después ya somos 4, mi otro hijo tiene 7 años y al volverla a ver disfrutamos tanto como la primera vez, no pasa de moda como los buenos clásicos. Son esas películas que tienen la cualidad de poder hacer varias lecturas interpretaciones y sacar diferentes aprendizajes.

Una genialidad, una obra maestra, una de las mejores películas que he visto y una de mis favoritas. Tiene una buenísima combinación de comedia, drama, romance y emoción. El humor sin duda es lo mejor de lo mejor. Me fascina la idea de la distorsión del tiempo que provoca, ya que no sabemos en realidad cuántos días o meses ha pasado el protagonista en este bucle interminable (¿años tal vez?), además de imaginar la posibilidad de un día despertar y que se repita el mismo día una y otra vez.

Al estar en un bucle infinito que parece no llegar a su fin, Phil experimenta todas y cada una las posibilidades, actividades y experiencias posibles que se le ocurren (hasta incluso llegar a la desesperación, al borde de la locura), por lo que cada día que se repite es una nueva oportunidad que tiene para cambiar algo de sí mismo, aprender una nueva lección y corregir sus errores. Al final, presenciamos la metamorfosis de un hombre.

En mi opinión, la reflexión principal es que es posible corregir y aprender de nuestros errores y conseguir evolucionar hacia una mejor versión de nosotros mismos. Sin duda es una película que pienso ver una y otra vez, y otra, y otra vez.

Con un argumento que, personalmente, creo que podría haber dado un poco más de sí. La verdad es que tiene escenas realmente graciosas. Una película mítica con momentos que es imposible no reirse.