Efectos secundarios

Inteligente, fría y apasionada al mismo tiempo.

Rooney Mara y Jude Law (con notables interpretaciones) protagonizan un dueto en el que sus voces se sobreponen en la narración una y otra vez a lo largo del film.

Planos reflexivos y calculadores de Soderbergh que vuelve a ponerse la bata para firmar un buen trhiller psicológico adentrándose una vez más en el antiséptico mundo de la farmacéutica como ya hizo en Contagio (2011).

El final: meritorio, pues logra sorprender hasta cierto punto a un espectador que acusa los efectos secundarios de residir en una sociedad crecientemente anestesiada.

Un film bien narrado, entretenido, sólido, efectivo y sin fisuras, al que empaña una resolución final despachada con demasiada ligereza. Soderberg lo resuelve todo con la pulcra, cómoda y equilibrada imperturbabilidad que ha desenfundado en sus últimas propuestas: sin inmutarse, con esa apática y solvente complacencia que exhiben los suficientes todoterreno. No queremos que se marche. Ni mucho menos. Pero si vuleve, esperemos que lo haga desentendiendose de la pasmosa corrección con la que ha acabado acorralando a su incuestionable oficio.

Una de las industrias más oscuras, en donde más corrupción se da, y moralmente más criticable es la farmacéutica. La puesta en el mercado de medicamentos peligrosos para la salud, el alto coste de los medicamentos, el tratar de no erradicar totalmente una enfermedad... hacen esta industria un tema buenísimo para realizar un largometraje. Por eso, la película "Efectos secundarios" decepciona enormemente al no continuar con la crítica mostrara al principio de ella.

El doctor Jonathan Banks es un psiquiatra que trata de darle lo mejor a su mujer y a su hijo haciendo muchísimas horas extras y participando en programas de investigación sobre los efectos secundarios de los nuevos medicamentos. Tras la desgracia producida por un extraño efecto secundario debido a un farmaco recetado a una paciente, los acontecimientos le destrozarán la vida.

Como ya se ha mencionado, el principal problema del largometraje es abandonar una interesante trama para convertirse en una película de intriga más. Sin embargo, si la consideramos como tal, ésta resulta una buena película de intriga con un sorprendente desenlace. Otra de sus cualidades es su guión que resulta sencillo, pero intenso y creíble.

De los intérpretes destacar a una inmensa Rooney Mara y a unos cumplidores Jode Law y Catherine Zeta-Jones. Del resto, lamentar el poco protagonsimo de Channing Tatum.

Del director Steven Soderbergh no podríamos decir que es de esos que se quedan anclados en un género cinematográfico aunque bien es cierto que conserva su estilo marcado en todas ellas, el cual personalmente siempre me resulta atrayente aunque el resultado final sea más o menos brillante. Esta que nos ocupa viendo el trailer me recordaba especialmente a una de mis favoritas de su filmografía como es Contagio. Efectos secundarios también engancha desde su inicio pero no tiene las cualidades que hacían a aquella tan notable.

Una historia intrigante sobre la industria farmacéutica, la dependencia a fármacos y el control de estos sobre la mente humana que a ratos se vuelve impresivible por sus giros de guión y acaba siendo algo decepcionante, diluyéndose por el camino por la cantidad de estos y porque algo que parecía bastante complejo y enrevesado se queda en doméstico y aún. Buenas actuaciones en general en las que habría que destacar a Jude Law sobretodo y Rooney Mara después y en las que los secundarios están algo desaprovechados y contribuyen a esa sensación errática de la parte final.

Volviendo al párrafo inicial, la cinta pierde en la comparación con Contagio por carecer de lo que la hacía más reseñable como su mezcla casi perfecta entre sobriedad y ritmo frenético y sobretodo por una densa, cargada y asfixiante atmósfera y una tensión que por momentos podía cortarse en el aire. Pese a ello, los “lamentos” van más por lo que pudo ser y no fue, lo cual no le evita ser un interesante y disfrutable thriller.

Nota: 6'3

http://www.elperiodic.com/noticias/238254_critica-efectos-secundarios-side-effects-2013.html

En twitter: @er_calderilla

Una historia con tintes de crítica económica, con toques de denuncia social, directos al lado oscuro va girando hasta llegar al thriller con pseudo dios protagonista capaz de urdir la contraoferta al plan inicial. Ostentosa la trama, tenía tintes de empatía, el enemigo cuanto más grande más se puede llegar a solidarizar el espectador... pero se torció. La trama se mantiene de principio a fin con niveles de tensión y giros dramáticos interesantes. Las interpretaciones no dejan de ser correctas, sin destacar una más que la otra. Entretenida puede ser la palabra, verista puede ser aceptada, verosímil sería un anhelo.