Frankenstein’s Army

Ya de por sí, el punto de la película es tan ridículo, que es imposible no experimentar cierta ternura. Pero ojo, no se dejen engañar, polrque quitando las imposibilidades técnicas históricas, la cinta es una maravillosa obra de misterio bélico y terror a lo grande, en toda regla, con un diseño visual aterrador y un gore no del todo digerible.
EL hijo de Víctor Frankenstein ha sido contratado por los nazis para desarrollar un escuadrón de hombres invencibles mezclando naturaleza humana, cadáveres y los artefactos más locos, a lo Silent Hill. Un pequeño batallón rojo llega a una iglesia en busca del 303, escuadrón ruso desaparecido en contienda y se encuentra con un terrible laboratorio donde los cadáveres no son sólo alimento.
Buena factura, he de reconocer que ha habido trozos que me han costado ver, y eso que estoy hecho al gore guarruno.
Toda la peli se supone que es el metraje encontrado grabado en 1945 (¡) con una cámara digital bastante resultona, pero ésto, en vez de alejarnos de la historia nos va metiendo en ella de forma bastante canalla.
Un trabajo excelente al que no doy más nota por alguna tontería suelta, pero que recomiendo encarecidamente a los aficionados al terror en busca de nuevas cosas.
Distinta, desde luego, es.
Lo mejor. El diseño artístico y visual. Asombroso. Entre shooter galáctico, porno leather, uniforme nazi y steam punk a saco.
Lo peor: Lo excesivo del personaje del loco y desquiciado doctor Frankenstein. La primera parte, bien realizada parece un documento bélico "realista". Aún así es la peor.
Me temo, amigos, que este director va a dar mucho que hablar en el futuro.
El brío y saber hacer no se pierden.

Eso sí, sensibles y escrupulosos, abstenerse.

Le he dado nada más y nada menos que un 6, y la razón es simple, desde su arranque, donde se hace una muy breve pero adecuada "presentación" de personajes, transcurre un rato interesante, hasta que se desata la locura, y a partir de ahí me quedé atrapado por la ingente cantidad de aberraciones visuales que no paraban de aparecer. Un delirio enfermizo de imágenes, escenas cañeras y agitación, pero todo rodado estilo cámara en mano, como si se tratara de un juego estilo "Doom" u otro "shooter" del estilo.

Falla un poco en la imaginación del Dr. Frankenstein, ya que sus "obras" no son demasiado peligrosas frente a soldados armados, pero aún así, da que pensar en lo que pudo haber pasado en aquellos tiempos donde cualquier tipo de experimento estaba permitido.

Mención especial a una larga escena, casi al final, sin corte alguno que, cuanto menos, aparte de dura es impresionante (detallitos en spoilers) y al personaje de Sasha, con apoteósico cartel final incluído.

Si buscas algo diferente, raro, o que no sea comercial, y que no sea de perritos o hadas, no te la pierdas !

Wolf.

Frankenstein's Army lo tiene todo para convertirse en un clásico del gore. Sí, sí, no es una exageración, no nos engañemos, en el gore cabe todo, y los aficionados tenemos un estómago cinematográfico que ya ya. Las sangrientas porque son sangrientas (bua, no he visto más sangre en mi vida, eso es un 8 en Filmaffinity) las sádicas por sádicas (jo, al tío le despellejan con una gilette, vamos: un 8), las cachondas por cachondas (sí, le he puesto un 8 en Filmaffinity, la peli es una mierda, pero es que a la tía esa le crecen dientes en el ojete), las cutres por cutres (cojonuda, serie B de las buenas, los bichos de pena, los cerebros eran de Litoral, los diálogos del tipo "toma monstruo joputa", cómo me he reído: un 8). Nos entregamos al gore con pasión de aficionado atlético: aunque el partido sea malo, siempre encontramos algún detalle, y sea como sea al domingo siguiente volvemos al campo.
Bueno, pues a lo que iba, Frankenstein's Army es un buen ejemplo. Esta ambientada en 1945, al final de la II Guerra Mundial. Un destacamento de soldados comunistas se pierde y llegan a la típica granja donde se cuece una mierda infernal (bueno, esto por resumir, es que el argumento tampoco es lo fuerte del gore). La peli no es buena, no está bien hecha (aunque tiene algunos detalles de dirección muy interesantes), pero sobre todo es entrañable: disfrazada de ciber-cutre-punk tiene un toque ochentero, casi familiar, como de Navidades: la culpa la tienen los muñecos, que son un poco tipo Henson (Chiripitifláutico dixit).
He leído algunas críticas de compis filmafiniteros que dicen que es muy desagradable pero vamos, que no, que es gore blandito; comparada con las burradas que hoy se hacen (Martyrs, Al Interieur, o los especiales de Nochevieja de la 1) los monstruos de FA son la familia Trapp.

La enésima aparición del doctor Frankenstein en la pantalla grande viene esta vez, ambientada en las postrimerías de la segunda guerra mundial. Es evidente la repercusión generada en el séptimo arte por la obra que Mary Shelley tuvo a bien escribir allá por el año 1818. Cientos de películas con mayor o menor fortuna han desfilado por salas de todo el mundo con todo tipo de versiones, algunas de excelente factura. En Frankenstein’s Army, vemos un punto de vista diferente y también muy sorprendente respecto al mito del demencial doctor. El holandés Richard Raaphorst firma el proyecto en su primer largo y el resultado es bueno. Cámara en mano y filmada a modo de mockumentary, las imágenes pueden resultar a veces algo mareantes, aunque no es la tónica general del film.

El argumento sencillo pero eficaz nos introduce poco a poco en la historia y deja para el final lo mejor de la trama. Para entonces ya estaremos más que enganchados al ver la gran cantidad de aberraciones, creadas por Frankenstein, surgir sin previo aviso en cualquier momento. El prolífico doctor no se conforma con generar un solo monstruo que inunda la cinta con decenas de ellos. Las imposibles criaturas tienen un marcado aire victoriano y causan sensación por su enorme rareza y singularidad. Además, cuentan con un trabajo de maquillaje excelente que denota un presupuesto austero pero bien aprovechado.

El reparto cumple su cometido con corrección y ayuda a mantener el interés debido a su naturalidad. Aunque el actor checo Karel Rodden en su papel de Vicktor Frankenstein destaca por encima del resto. Hemos podido verle interpretar personajes de cierta importancia en multitud de títulos de diversos géneros, como RocknRolla de Guy Ritchie o Hellboy de Guillermo del Toro.

Noreste de Alemania 1945, un grupo de soldados rusos queda atrapado en territorio enemigo. A la espera de la invasión por parte de las fuerzas aliadas, se encuentran con una siniestra población la cual parece estar bajo la influencia de algo maligno. Pronto descubrirán el motivo, el doctor Frankenstein trabaja allí para los nazis en un desesperado intento por mantener el poder de Alemania sobre el mundo. Sus experimentos con seres humanos, sobrepasan con creces cualquier barrera moral que haya existido.

Película original a la par que extravagante, demuestra una excelente ambientación, unos recursos bien aprovechados y una innegable predilección por lo grotesco. Sin duda hará las delicias de cualquier aficionado que disfrute con lo antiestético y lo desagradable.

http://www.terrorweekend.com/2013/10/frankensteins-army-review.html

Hace tiempo vi Outpost2, una peli con mutógenos nazis resucitados especialmente diseñados para dar por saco al glorioso ejército aliado (de todos es sabido que Hitler invirtió muchos dólares y gran parte de sus científicos en investigar el mundo de los muertos como arma contra occidente, y no es que lo diga yo, sale en Hellboy, Capitán América y muchas otras. Rigor ante todo :-)
La película se articula alrededor de esta conocida tendencia de Adolfo hacia lo paranormal.

En este caso, los nazis contratan nada más y nada menos que al hijo de Frankenstein (y yo que pensaba que no había tenido hijos o que serían muy mayores), que se dedica a juntar brazos y piernas sanguinolentas con cacerolas, radiadores, taladros, radiales, motores de avión, fiambreras eléctricas y cerebros, consiguiendo unos mutógenos con muy mala leche.

La primera parte de la película (hasta que aparecen los mecanos), está bien, se deja ver. Luego entran en escena los engendros mecánicos. Al menos tres de ellos están inspirados en la Guerra de las Galaxias, Hans (R2D2), una enfermera que es igual a las bailarinas del cara de sapo aquel que congela a Harrison Ford, y una especie de tanqueta mezcla de los cuadrúpedos mecánicos del imperio contraataca y un primer prototipo de Terminator. El resto son realmente originales, me recuerdan a los muñecos de Jim Hensos en "Dentro del laberinto". Además hay carnaza, fiambres colgando del techo, reventadas de cara, extracciones de intestinos, apaños encefálicos y demás perrerías bastante bien aliñadas.

Ah sí, la película es del tipo "cámara en mano", pero no se hace pesada como tantas otras. A mi me ha resultado entretenida, y aunque no es para tirar cohetes, merece la pena si te gustan este tipo de películas.