Como comedia, pues no, apenas tiene comedia. Lo más importante de la película es la trama principal, que enseguida ya se ve y se entiende y ya está. La idea es buena, pero creo que le faltaba más desarrollo, ya que los personajes no te los crees muchos en algunos momentos. Hay grandes actores, pero apenas tienen a donde aferrarse, como Sergi López, que está un poco perdido. Nathalie Poza tiene algo más pero se la nota que le falta más cuerpo en su personaje. Y Candela Peña, que principalmente he visto esta película por esta actriz varias veces se nota sola en un personaje que también le hace falta más fuerza.

Curiosamente, Paula Usero, como actriz revelación, es la que mejor lo tiene o ha sabido aprovechar al máximo su personaje, ya que para mí, en esta película, es la mejor interpretativamente.

Bastante descafeinada.

La verdad que no me gustan ni Icíar Bollain, sobre todo por su última película de cuyo nombre no me quiero acordar...
Ni tampoco Candela Peña, pero esta peli no está del todo mal a fuerza de ser sincero.
Esta bien rodada, pero es muy mentirosa y ambigua su historia, pero Candela Peña brilla en el papel de una extraña mujer, con una historia interesante.
Tiene un detalle feo el personaje de Candela con su padre en la historia, al que literalmente deja solo en la vida porque se siente mejor sin la carga del anciano que le pide ayuda y la hija no puede con él, esto no es más que un reflejo de nuestra sociedad individualista y egoísta donde en muchísimos casos no se quiere saber nada de los padres cuando envejecen...
Esta película se puede ver, y destaca su fotografía y su música, pero la empeora varias escenas muy mediocres,.en definitiva un film con altibajos.

Una señora supercargante se casa consigo misma porque está harta de cuidar a los demás y todos tenemos que aplaudir su absurda filosofía de la vida. Que esto lo dirija Icíar Bollaín hace que la experiencia sea aún más deprimente. Eso sí, siempre es un gustazo ver a Candela Peña, Sergi López y el resto de esta basca desfilar por la pantalla.

Y no fue. Propuesta interesante, que se quedó en eso, en propuesta; Tomemos como punto de partida la noticia que saltó hace unos años sobre unas mujeres, de distintas edades y nacionalidades, que habían decidido casarse, pero ¡Ohh sorpresa! con ellas mismas.

¿Qué es esto? Me lo expliquen, pensé. Hasta ayer, que me topo con esta película cuya trama es la de una mujer que se propone coser con algunos retales del pasado un nuevo vestido, pero no cualquier vestido, sino uno ¡de novia!; sin ser consciente quizás, de lo que representa, toda una serie de convencionalismos que llevará cosidos, como adornos tintineantes, imposibles de arrancar (si lo sabré yo, que trabajé en una tienda de "idem" unos años)

Lo que debería ser una comedia, ya en los primeros minutos de la cinta, se convierte en una tragicomedia, una protagonista que vive angustiada, con bastantes compromisos familiares que a penas le dejan respirar. El propio espectador se siente asfixiado viendo a Rosa, "Rous" para los amigos; ir de aquí para allá atendiendo las exigencias de su tirana familia, a la que ni siquiera le dejan terminar una frase. Tal es el abuso que ejerce su hermano (Sergi López), que en alguna secuencia, literalmente te dan ganas de estrangularlo, a ver si se calla.

No creo que la directora se sienta orgullosa por el resultado, ni ella ni su protagonista porque tampoco veo que sea esta su mejor representación. Obtuvo ocho nominaciones a los Goya, pero solo recibió el de música (Canción Que no, que no) de Rozalén y mejor actriz de reparto a Nathalie Poza, a mi juicio el modo que ha tenido la academia de decir que para este viaje no era necesario tanta alforja.

Parece pretender algo que no logra alcanzar, con lo que pasará a la historia como una comedia intrascendente que no veo destaque en nada excepto en lo único que encuentro bueno, lo poco que dura, menos de 100 minutos de entretenimiento sin más.