Cuando me puse a ver esta película me la esperaba mucho más gamberra, pero lo que me encontré fueron un conjunto de historias entrelazadas que se suceden bajo un ambiente muy positivo al verse como van cerrándose los portones de los bares o por las mañanas cuando el dueño de un bar va a primera hora a comprar pescados para las tapas o las amas de casa van a hacer la compra a su tienda de siempre donde conocen a la dueña.

En definitiva, me ha gustado ese ambiente tranquilizador donde las personas conforman un grupo cerrado y cohesionado encuadrando las historias para ser contadas bajo esa perspectiva pero sin dejar de ser entretenidas.

Aun así es una película que me deja con ganas de más, siendo además la duración escasa me hubiera gustado que hubieran profundizado más en las historias para haberla votado mejor.

Dicen las malas lenguas, bueno, algunos comentaristas importantes, que esta peli tiene mucho de costumbrismo. Pero reflexionemos sobre las historias: mujer madura que tiene cibernovio argentino desde hace un año, tabernero que contrata a un chino en el negocio porque la mujer le ha dejado, abuela que trafica con drogas, joven que desea la llegada del verano para ligar con las guiris... Si tenemos en cuenta la ligazón que tiene el costumbrismo con la tradición, y que en esta película se representan realidades muy comtenporáneas, llegaremos a la conclusión de que a lo máximo que podría aspirar es a una suerte de "neocostumbrismo". No parece entonces que estas historias reflejen costumbres típicas del país, sino nuevas costumbres; no aquellas que se añoran por los nostálgicos, sino las que emergen y van asentándose poco a poco en la mentalidad de nuestra cultura.

Le doy mi bendición por ello.

Y con dos tapas así que más se puede pedir...
Una entretenida película ( made in Spain sí ) que entrelaza varias historias de forma coherente y entretenida.
No será alta cocina pero si que es esa comida del bar del barrio que resulta sencilla y apetecible.
Y aunque desconozco la intención de si el título se refería solo al ambiente de un bar, ya que también se puede aplicar a TAPAS como sinónimo de EXCUSAS que todos usamos.
Criticar que es parecido a una serie de televisión la verdad mi limitada inteligencia no alcanza a comprenderlo como concepto negativo y menos aún referirse despectivamente con " historia de barrio ". Que me disculpen los que vivan en urbanizaciones o barrios altos, pero el encanto de ver una historia que podría pasar perfectamente en tu BARRIO lo veo como algo más positivo que negativo.
Una entrañable obra que entretiene y mezcla perfectamente el drama con la comedia, así que no deberías perdértela

Esta película me ha transmitido sencillez, cercanía y honestidad. Por fin algo diferente a lo que suele ofrecer el cine patrio.

Una película en la que se enlazan historias de diversos personajes en un barrio catalán y que, por el hecho de ser humanos, no son perfectos: un dueño de bar racista con problemas con su esposa, una mujer solitaria en busca del amor, unos jóvenes desnortados, una pareja de ancianos, entre otros más. Sus historias acaban interconectándose y vivirán acontecimientos que cambiarán sus vidas.

Con un guión sencillo pero eficaz se nos narra una historia entretenida de sentimientos variados y cruzados. Los actores están excelentes en sus papeles consiguiendo, además, hacer cercana y amena la película. No estamos hablando de personajes forzados ni estereotipados: es gente que podrías encontrarte tranquilamente en tu barrio/vecindario. El apartado técnico, si bien no es una maravilla hollywoodiense, no perjudica para nada al largometraje. La música, pues bueno... no era mucho de mi estilo, pero se ajusta bastante bien.

Si la gente quiere ver algo español que se salga de las típicas comedias guarro-escatológicas o de los dramas "progres", Tapas es una opción recomendable.

Pues en el título que le he puesto a la crítica está básicamente el argumento de ésta película, que más que eso, parece algún capítulo de alguna serie por ahí desperdigada.

Ahora bien, que ya que sí que estoy dispuesto a coger mi móvil para grabar por ahí al primero que pille, yo que sé, a mi primo cagando, a algún compi del curro haciéndose un porrillo, a mi hermana robando "l´avecrem" en el súper, o cualquier cosa por el estilo que hagan en sus vidas, los junto a los tres en el ayuntamiento pagando el IBI, para que tengan algo jodídamente en común, y me monto una peli y punto.
Pero en vez de llamarla Tapas, que por otra parte no sé qué relación tiene con el no-argumento del "flin", pues la voy a llamar, yo que sé, Culos, por lo de poner el culo con lo del puto IBI, y así sería la segunda parte, Tapa-Culos, olé qué "grasia"...