Pues me he comido las 6 temporadas y en líneas generales muy buena. Hacía tiempo que no pillaba algo de ciencia ficción de este nivel. En el apartado técnico va mejorando con las temporadas y la historia es muy interesante, mezclando acción y política. Me encanto la primera temporada con esa mezcla de ciencia ficción y el cine negro. El rollo de la protomolécula te mantiene muy intrigado. Pena que al final se diluya y pierda importancia en la trama.

En el apartado de lo que no me ha gustado, primero esa última temporada precipitada que es algo de corte de rollo con solo seis capítulos y dejando cosas en el tintero. Pero sobre todo en un reparto que destaca en muchos personajes, los principales del capitán Holden y su colega Nagata me parecen una auténtica cagada de casting. Me parecieron muy malos desde el principio y la temporada donde se centran en los problemas materno filiales de Nagata se me hicieron muy bola, un auténtico coñazo. El hijo de Nagata también me pareció pésimo en su trabajo. Le hubiera dado un diez sin duda de no ser por ese motivo. Nada que me impidiera disfrutar la serie como un enano y echarla ahora de menos.

No esperaba encontrar una serie tan bien elaborada sobre ciencia ficción en Amazon, pero ésta está bien planteada en cuanto al guión y los acontecimiento políticos que se dan en ella son curiosos e interesantes de seguir. El aspecto técnico está muy bien trabajado también. Sin embargo, no le puedo poner más de un 7 y ya me parece que estoy siendo muy generoso.

Los dos protagonistas, Holden y Nakata me dan exactamente igual durante toda la serie, son protagonistas y los siento muy forzados, me interesa mucho más lo que ocurre alrededor de ellos que ellos mismos. No ayuda tampoco que la actuación de ambos durante toda la serie sea bastante mediocre. Me la vi en versión original y de verdad que no conseguía engancharme, prefería que se desarrollase más el arco narrativo de personajes como Amos o Drummer, o cualquiera que no fueran estos dos.

6 temporadas que esconden lo mejor en su mitad. De menos a más. La trama, los personajes y la fuerza de las historias crecen y maduran como un árbol. Las ramificaciones y los frutos llegan para luego despedirse de forma rápida y abrupta, pero el sabor que te deja la Rocinante y su tripulación andante perdura en la memoria con una sonrisa de placer. Buenas serie de ciencia ficción. Una opción entre la biblioteca digital disponible en las plataformas.

Geopolítica,tensión entre bloques, lucha de clases, crisis de refugiados… ¿Drama social de ficción? No, pero todo eso y mucho más lo podemos encontrar en “The Expanse”, serie de ciencia ficción, muy pegada a la realidad, que me ha tenido totalmente enganchado en sus seis temporadas.

La serie se sitúa en un futuro lejano en el que la humanidad se ha “expandido” por nuestro sistema solar, colonizando Marte y creando un rosario de asentamientos humanos en el llamado cinturón de asteroides que hay entre la Tierra y el planeta rojo. Sobre este escenario cuatro personas atormentadas y de distinta procedencia (dos terrícolas, una cinturoniana y un humano nacido en marte), tripulando la nave ROCINANTE (con la que cargan continuamente contra “gigantes”), durante seis temporadas salvarán a la humanidad de conflictos bélicos, intrigas políticas y una protomolécula con muy mala uva.

La gente que entiende de esto me dice que la serie decae a partir de la temporada tres. Desde luego, el trepidante final de la segunda temporada es difícil de mantener, pero aunque se pierde algo de fuelle a mitad de la temporada tres, el relato te sigue enganchado y la calidad de los capítulos se mantiene a un nivel muy aceptable.
Eso sí, hay que tener un poco de paciencia, darle un margen de confianza a su visionado hasta llegar a la mitad de la primera temporada. Al principio la serie parece algo lenta y que bebe demasiado de tramas detectivescas estilo Blade Runner; pero, a partir del capítulo 6/7 ,da un giro brusco y se hace mucho más interesante.

El público aficionado a la Ciencia Ficción imagino que conocerá de sobra esta serie, pero para quien no sea aficionado al género, es una oportunidad para acercarse a él y , a la vez , visionar un relato de temática universal muy conseguido.

Terminar The Expanse ha sido una experiencia única. No es una serie para devorar rápidamente, pero cada temporada ha merecido la espera. Su manera de plasmar la ciencia ficción combina el impacto visual con un enfoque realista que no se ve con frecuencia en televisión.

Lo que más me ha impresionado es cómo presenta el espacio. No es un simple decorado espectacular, sino un entorno hostil donde cada error puede tener consecuencias graves. No se limita a mostrarlo, sino que lo convierte en una pieza clave de la historia, respetando las leyes de la física y manteniendo una tensión constante en cada episodio.

Los personajes también son un gran acierto. A lo largo de las temporadas evolucionan con naturalidad, enfrentando dilemas y situaciones que los hacen humanos. No hay héroes perfectos ni villanos de manual; cada uno tiene sus propias ambiciones, temores y contradicciones, lo que los hace más reales y cercanos.

El ritmo varía. Hay momentos más pausados que preparan el terreno para escenas de gran intensidad. Pero cuando la serie alcanza su punto más alto, la tensión es tal que resulta difícil apartar la mirada.

Ahora que la he terminado, me queda esa sensación de vacío que dejan las historias que realmente impactan. No solo ha sido una serie que me ha mantenido enganchado, también me ha hecho reflexionar y sumergirme en su universo de una forma que pocas logran. Sin duda, es de las mejores series de ciencia ficción que he visto.