Un día normal me dijeron de ir a cine y ver este film de Clint Eastwood. La gran mayoria se esperaba una película muy buena, ya sea por el director o por el presupuesto. La verdad es que no esta nada mal, pero tampoco es para celebrar un cuatro de julio cuando se va a ver.
Lo primero que cabe destacar y que se hace notar ya en los primeros minutos de la película es el doblaje, no es que sea malo en general, pero en ocasiones se nota flojo y no bien cuadrado, cosa que no debería ocurrir y, menos con las producciones que destacan más.
El ritmo de la película no convence del todo, ya que a veces las partes no bélicas se hacen demasiadas pesadas para contar lo mismo.
Aparte de estos dos detalles, la película merece mención de muchas otros buenos factores, no para considerarla una de las mejores pero si para decir que es una buena película. Una de ellos es la fotografía, que va desde la de relleno hasta momentos brillantes. Otro es la emotividad de la película y su punto de vista tanto estadounidense como realista, sin muertes heróicas que alimentan la muerte por la patria. Simplemente tal y como fue. Por supuesto recomiendo que sea vista, pero que no se espere una película bélica más, ya que de no trata de la guerra, sino de algunos de esos hombres de aquella guerra.

Un antiguo enmascarado es hallado muerto (asesinado). De aquí surge una trama compleja y profunda, que conduce por las callejuelas de la sociedad occidental de los 80´s, hasta un final épico. No espereis ver algo parecido a Batman, Spiderman, Blade o Punisher. No es una película de superheroes, como al igual el cómic no es un cómic del genero de los superheroes. Y, otro error muy grande, es llevar a niños a ver esta película. Por favor, antes se debe mirar el código de edad o consultar con alguien conocedor del tema, como en todo.
Si bien el cómic es una enorme crítica a la sociedad occidental, utilizando el género occidental del cómic (superheroes), lo hace como una parodia (es como decir que la Naranja Mecánica es una película de aventuras o de acción). Y esto mismo es lo que vereis en la pantalla, reducido a una tercera o cuarta parte de la profundidad del cómic, ya que no puede ser llevado en su conjunto en un solo film. Sin embargo, para quien no haya leido el cómic y tenga una mente abierta, podrá disfrutar de esta crítica social, que, como he dicho antes, no se puede comparar con el cómic.

Este film se puede resumir con el título puesto en esta crítica. La película sigue la vida de un bandido (Burns) y de un capitán del ejercito inglés (Stanley) en la árida Australia, cuando el segundo hace (como indica el nombre del film) una proposición al primero para que él y su hermano sean libres y perdonados, a cambio de que mate a su hermano mayor (otro Burns), también bandido, oculto en las montañas y considerado un monstruo. Así da comienzo la historia, que narra esos días decisivos de ambos personajes.
Con un ambiente de dureza, melancolía, desesperanza y marginación, con un toque de misticismo e intelectualidad. Durante el film no se ven escenas muy duras, pero el ambiente, el como se lo toman, la normalidad con como se lo toman todo, crea un ambiente muy duro; como personajes maltratados piensan en lo bueno del mundo con melancolía. Con todo esto mezclado con personajes de la alta sociedad, castigando con dureza, pero siendo realmente civilizados. Es, en resumen, una película con moraleja: no hay un bando bueno ni uno malo, solo hay personas buenas y malas, divididas en bandos
En cuanto a la música, es una maravilla: uno está viendo una secuencia de la tranquila vida del campo con música clásica cuando al segundo siguiente se pasa a los bandidos, con musica rock. Bueno, con solo decir que es de Nick Cave (adémas de que es el guionista), sabemos seguro que la música o va a acompañar a la película, va a ser parte de la película.
Los planos del film son muy buenos, en casi ningún momento uno ve una imagen perdida; y los actores practicamente inmejorable; no hay actuaciones eclipsantes, pero son muy buenas.
Y por último, ese toque de romanticismo sobre el oeste, de intelectualidad y misticismo de personajes pobres y marginados, que le da el toque que le faltó a Blueberry; pero guardando el realismo en todo momento.
Una pelicula que para los aficcionados del western debe ser una referencia.

No fui a verla al cine porque al escuchar que habían hecho un guión mezclando las historias de las aventuras del capitán pensé: o han hecho un guión magnífico o una mierda. Desgraciadamente fue lo segundo. No pude ni terminar de verla de lo mala que era y, eso que me leído las novelas. Mi hermano que la estaba viendo conmigo ( y que no se ha leído los libros) me dijo a la hora y veinte de comenzar la película: bueno, y esto ¿de qué va?. Yo dijé: ni idea. Un bodrio, una verguenza. ¨Cuentan¨ aventura tras aventura de Alatriste, resumidas en unos veinte minutos cada una, sin un guión que las enlace excepto los actores (menos mal que hay algo que las enlaza).
Y esa es otra, los actores y sus cosas. Viggo actua bien, pero me gustaría decir quien fue el puñetero sordo que dijo que había perdido su acento argentino y que ahora hablaba como un castellano de pura cepa porque... ! como demonios se puede decir tal estupidez! Pues eso, el papel no le va para nada, le va como un microondas a un pingüino. Después, me gustaria saber a quién se le ocurrió la brillante idea de poner una mujer (no se mucho de actrices españolas) en el papel del viejo Fray Emilio Bocanegra. Cuando vi la linea de la peluca que llevaba (has leido bien, se ve) me di por vencido por esperar que el film mejorase. ¨Buenas¨ interpretaciones de Eduardo Noriega y Unax Ugalde, que destacan no por que las demás sean malas, es que no casi ninguna otra además de la de Viggo y Juan Echanove.
Los combates, que en alguna ocasión se salvan, suelen ser flojos y que apenas se deja ver quien ataca a quien, con que o algo.
Yo creo que lo único que salva a esta película de tener un 0 en la crítica es el vestuario, que hay que quitarse el sombrero, por ser lo único que está al nivel de esta ¨superproducción¨ (me da verguenza decir que es española).

Resident Evil 5: Venganza carece simplemente de guión interesante y, falla totalmente en su estructura narrativa (vamos, ambas faltas son como hermanas). He visto un par de entregas anteriores, y jugado a varios de los juegos. Vamos, cuando pongo la nota que pongo es viniendo de una persona que considera la 3 entrega cinematográfica pasable...

Que el guión consista puramente en un escape (no digo más, aunque no hay mucho que contar) en el que sabemos desde el principio que no va a ver giros de guión interesantes ni sorpresas dignas de un oscar la hace ya pesada. Pero, es que además se intenta plantear como la narrativa de un videojuego: disparos y disparos sin retos dignos de cambio de rumbo en el guión. Hay que aprender, que por mucho que nos gusten los videojuegos (a mí el primero), la narrativa es distinta: a mi me cansa ver acciones de tiroteos sin sentido cuando no estoy participando con un mando o ratón y teclado. Y, aun menos cuando no hay objetivo alguno. En un videojuego arcade, por lo menos te entretiene. Y, normalmente, cualquier videojuego medio tiene un guión mucho mejor que este bodrio...
Eso sí, personajes de los juegos y enemigos de la última entrega. Pero sigue siendo una mierda.