Ferdinand Zecca (19 de febrero 1864, París - 23 de marzo de 1947, Saint-Mandé) fue un cineasta francés, director, productor, actor y guionista. Principal director de la Pathé-Frères, la productora de cine más importante del mundo antes de la Primera Guerra Mundial.

Este corto lo co-dirige junto al aragonés Segundo de Chomón. Las hadas eran temas recurrentes en estos primeros cortos de la historia del cine (recordemos "El hada de las flores", "El hada de las coles", etc...). Todavía hoy en día sorprenden los efectos especiales y el coloreado a mano.

Por otro lado, el corto es muy recomendable para aquellos que gustan de los finales felices.

Cada uno colecciona lo que puede, o lo que le da la gana. Hay incluso quien tiene una colección de críticas en Filmaffinity.

Como siempre, conocemos algo sobre el director: Dimitri Kozma es un artista portador de títulos de grado en Artes Plásticas, sistemas gráficos y multimedia. Nacido en San Paulo, Brasil y actual residente de Vancouver, Canadá. Poseedor de su propia compañía en Brasil desde el 2000, llamada Orbe Midia.

¿QUE COLLONS hace en esta historia un elfo negrata? Me refiero al lugarteniente del elfo oscuro Malekith. ¿Y en qué pensaban los del casting cuando escogieron al Guardian de Asgard, otro negro? ¿Y por qué aparecen en la cinta algunos soldados asgardianos negros? ¿Es que no había actores blancos y rubios, de tipo escandinavo?

Por supuesto, estas preguntas son retóricas. Ya sabemos de la estupidez del cine americano a la hora de realizar obras con su mal entendida "corrección política". Metiendo algunos negritos en el reparto la minoría afroamericana queda apaciguada y la mayoría blanca se siente magnánima y satisfecha: "Que buenos somos que nos hemos dignado a meter algún actor de color para que el mundo vea que en los USA no hay discriminación racial."

Más casos de corrección político-racial mal entendida:

1. En 1991, Morgan Freeman tenia que dar vida a un árabe amigo de Robin Hood en la peli "Robin Hood, príncipe de los ladrones". ¿Un árabe negro? ¿Quizás un subsahariano criado con los árabes? Un poco cogido por los pelos, pero aún así, ¿era necesario introducir ese nuevo personaje que no aparece en ninguna crónica ni tradición de Robin Hood o se hizo para meter un negro en la peli?

2. Una peli reciente, de 2010: "Centurión". Uno de los legionarios que huyen junto al centurión protagonista resultaba ser un negro. En la obra se mencionaba alegremente que era númida, sin haberse documentado antes, puesto que los númidas eran de raza bereber.

3. Pelis recientes de la Marvel: "Los Vengadores", "Capitán América" y toda la pesca. Aparece un Coronel Furia interpretado por Samuel L. Jackson. Esto todavía lo aceptamos porque en el universo Ultimate de Marvel, Nick Fury es negro, pero ¿no podían haber optado por el Nick Fury original, o sea, blanco? ¿O lo hicieron, una vez más, por mal entendida corrección política?

Si ud. recuerda más casos similares, que seguro que los hay, por favor escríbame para incluirlos en futuras críticas.

Esta peli es muy mala. Partiendo del supuesto de que las pelis basadas en videojuegos no suelen ser gran cosa (ahí quedan engendros tipo "Resident Evil", "Mortal Kombat", "Street Fighter" y así una larga lista), en esta cinta se ha intentado copiar el argumento y el estilo de pelis de acción tipo "El Caso Bourne", "Shooter", etc. Es decir, la ya cansina historia del superagente creado para matar que se ve envuelto en una conspiración contra él mismo (¿les suena?). No he jugado al videojuego e ignoro si ese es su argumento, pero sí es cierto que resulta una cosa ya un tanto manida...

A destacar la interpretación de Timothy Olyphant. Este chico lo borda interpretando a un personaje de 16 bits (?). Su poca gestualidad y su manera de moverse un poco encorsetada hace que en todo momento nos parezca estar delante de la consola. Le auguramos un gran futuro en el mundo de los videojuegos, pero por favor, deje de hacer cine.

Casi al final hay un guiño a otra de las "grandes" obras de la época. La "obra maestra" del cine de terror cómico: "Saw".

Posiblemente la única película de Jackie Chan que merece la pena rescatar de su filmografía, por lo que tiene de irreverente y políticamente incorrecta. Ataca el imperialismo inglés, y más concretamente la expoliación a la que sometieron los británicos a sus antiguas colonias. Por otro lado hace una divertida apología del alcohol como sustancia válida para las artes marciales por su capacidad para enmascarar el dolor y para relajar cuerpo y mente.

Según el doctor, padre de Jackie Chan, los boxeadores borrachos aprovechan el alcohol para llevar su lucha a un estado de excelencia. Lo que ocurre es que mucho de ellos acaban siendo víctimas de la misma sustancia que les ha llevado al summum de la lucha, es decir, alcoholizados y convertidos en desechos de la sociedad.

Sin embargo, Jackie Chan, a pesar de la promesa de no volver a beber que le hace a su família, rompe esa misma promesa para deleitarnos con una serie de técnicas que harían las delicias del mismísimo Bruce Lee.

El guión, por supuesto, es deleznable. Pero en este tipo de cintas, ¿quién busca un guión coherente?

Saludos pascueros.