Un drama muy blandito con algunos aspectos bastantes interesantes y otros demasiado típicos o vacuos para suponer en conjunto algo verdaderamente estimulante.

Su premisa es interesante y el modo en el que se entremezclan esas realidades es su mejor baza. Los primeros episodios enganchan con mucha facilidad y es donde más brilla la serie. Cuando se centran en el romance nos encontramos algo ya visto es muchos doramas anteriores con momentos muy intensos que no vienen a cuento, el típico tercero en discordia, y un vaivén de encuentros y despedidas a cada cual más intensa que la anterior que realmente no funciona lo bien que debería. Al menos a mí me ha parecido tan artificial y predecible que difícilmente he podido entrar en su juego.

La parte final ignora la coherencia argumental que había mantenido la serie respecto a su premisa para realizar una amalgama de juegos temporales que te pueden hacer perder el hilo en algún momento. También se siente que ciertos personajes secundarios se quedan sin una buena conclusión y el final es muy muy blandito.

¿Merece la pena? Si buscas el típico dorama romántico con toques de fantasía imagino que sí. Si buscas algo más estimulante no, hay mejores opciones.

He visto las 5 primeras temporadas de "los 100", es decir, estoy al día con la serie. La llevo siguiendo desde su primera temporada, soy un veterano en ella. Por ello, a continuación voy a dar mi opinión sobre la misma desde un punto de vista global.

"Los 100" es una serie dirigida a un público adolescente en su mayor parte, por ello hay que comprender el desarrollo de la misma. Su evolución ha sido notoria, desde la primera temporada hasta la cuarta se puede decir que va a mejor y que el resultado es positivo, la quinta temporada quizás sea la más floja, pero de nuevo, consiguen un final que te deja totalmente atrapado y con ilusión por ver la siguiente.

Es evidente, y a mí particularmente me molesta, que es una serie con muchos fallos: un guión que muchas veces hace aguas por la gran cantidad de giros que tiene, lagunas argumentales (¿Explicación del Edén?), las secuencias de acción dejan bastante que desear y sus efectos especiales también son bastantes olvidables.

¿Entonces por qué la recomiendo? Porque hay que recordar el público al que va dirigido. No es una serie para cinéfilos y seriéfilos que busquen una serie excelente, sin embargo, para pasar un buen rato y consumir algo ligero, entretenido y rápido es ideal.

¿Qué es lo que hace única a esta serie? Sus personajes. Empezando por el gran número de ellos que vamos a encontrar, la evolución de cada personaje con el transcurrir de los episodios, la relaciones entre ellos, las decisiones que deben tomar en cada situación. Esto es lo que hace única a esta serie y que merezca la pena.

Recomendada para todos aquellos que busquen una serie sencilla, entretenida, donde haya tanto acción como romance, y un toque de drama.

120 pulsaciones por minuto parece más un propio documental sobre el sida que un drama en su esencia.

La primera parte de film, es básicamente un documental sobre el grupo activista Act Up y sus miembros, la situación en general de la enfermedad en el mundo y su aceptación en la sociedad. Bastantes diálogos, un buen ritmo, hasta aquí todo bastante bien.

En su segunda mitad, opta por un enfoque más personal, centrándolo en un par de personajes y la evolución final de la enfermedad, la angustia que conlleva, el sufrimiento para los seres queridos, en definitiva una situación muy dura.

¿Funciona la fórmula documental/drama? Pues sí y no. Es una película muy interesante, sin lugar a dudas, pero quizás la intensidad emocional de la película no es la que debiera ser, como dice mucha gente en las propias críticas de esta página: "podría haber dado para mucho más con tal argumento". Y es que, para alguien de la generación de los 90, que no hemos vivido la etapa más dura de la enfermedad ni hemos sido conscientes de ella, quizás se quede algo superficial lo que nos transmite este film.

Os la recomiendo, tanto si os interesa el tema, como si no, porque es bastante interesante. También es verdad que le sobra metraje, por lo menos 20 minutos se podrían quedar fuera (si no se alargasen tanto algunas escenas sexuales y otras escenas no tan necesarias, la extensión estaría mejor), y si os interesa la temática os recomiendo: Dallas Buyer Club, bastante mejor que ésta, en mi humilde opinión.

Solo es necesario ver los primeros minutos de la película, situarse, observar y pensar por un segundo: ¿a quién cojones se le ocurrió el plan de enviar a los soldados a desembarcar ahí?

Creo que desde ese momento, uno se da cuenta de la realidad de esta película. Aquí se narra la guerra tal y como es; sucia, cruel, aleatoria y sobretodo triste, muy triste.

No estamos ante el típico film bélico donde todo funciona correctamente y con suerte hay alguna muerte dramática, ni encontramos al típico héroe que salva muchas vidas y logra salir victorioso en cada combate. Salvar al soldado Ryan nos traslada una realidad, y en la realidad, lo raro es ser él afortunado de salir con vida en cada batalla y poder volver a casa.

Creo que la intención de Spielberg era trasmitirnos ese sentimiento, esa tensión que consigue crear y esa intensidad con la que lo logra, que es, sin lugar a dudas, excepcional.

No se trata de quién es el bando bueno malo, o de si los Aliados son geniales y los alemanes siempre son los malos, se trata de la guerra, simple y llanamente, transmitir cómo es la guerra.

En cuanto al elenco de actores, poco se puede decir, un reparto de lujo.

5 Oscars y 2 Globos de Oro, entre otros muchos premios, que son totalmente merecidos. Una de las mejores películas dentro del género bélico de las que se puede disfrutar a día de hoy, toda una pequeña joya de 170 minutos.

Si este año había comenzado con algunos dramas donde había comentarios sociales como en 'The Interest of Love' o críticas hacia los roles de género de forma divertida e inofensiva como en 'Crash Course in Romance', 'Love to Hate You' viene a dar un golpe sobre la mesa al cuestionar tanto los roles como las prejuicios de género vigentes en la sociedad. Y lo hace sin ningún tipo de sutileza pero con una apuesta que resulta tan divertida como adictiva, una vez que empiezas el primer episodio terminas haciendo maratón antes de que te puedas dar cuenta.

No es que sea una serie con ánimo de dejar huella pero hacía tiempo que un kdrama no me enganchaba tanto como para tener que verlo de una sentada. Esto se deba también a que es muy ligero, dinámico y no se atasca demasiado en sus enredos. Al mismo tiempo, hay una atractivo innegable en su reparto. Estamos en el show de Kim Ok-bin con un papel que parece escrito especialmente para ella y que aprovecha muy bien sus cualidades. Quizás algunas personas que solo ven kdramas no la conocían pero es una de las mejores actrices coreanas de los últimos años. Es un poco triste reconocer que su filmografía queda muy lejos de su talento pero encontramos honrosas excepciones como 'The Thirst' y 'The Villainess'.

Ojalá Park Chan-wook, o algún otro grande, la vuelva a contratar pronto porque tiene todo para ser una de esas estrellas que trascienden internacionalmente.

El resto del reparto cumple con nota. Yoo Teo lo hace muy bien y Kim Ji-hoon confirma que tiene una presencia y un carisma de estrella. Ya cautivó con su pequeño papel en 'The Flower of Evil' y aquí vuelve a ratificar esas sensaciones. Por cierto, curiosa la contraposición de la nueva dinámica que comparte con Lee Joo-bin tras venir de rodar el remake de 'La Casa de Papel' juntos.

En definitiva, una serie para pasar un buen rato con su toque divertido, ligero y cálido, sin olvidar realizar su comentario social que es, en realidad, solo un reflejo de cómo la propia industria revisa y cambia sus enfoques conforme avanza también la realidad social y evoluciona la propia audiencia. Muy recomendable.