Haz click aquí para copiar la URL
España España · Barcelona
Críticas de Ochentero
<< 1 10 11 12 20 30 >>
Críticas 149
Críticas ordenadas por utilidad
7
4 de febrero de 2018
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
El Gran Despilfarro es una de esas comedias tan típicas de los 80, tanto en temática (Hacerse rico, el sueño americano, las clases sociales...) y con una forma de hacer humor exagerado y efectista.
Recuerdo que cuando la vi de niño me chocó el reto que proponía la película: Gastarte 30 millones de dólares (de la época) en un mes y al acabar ese mes tener que volver simplemente con lo puesto. Recuerdo que me como niño, y teniendo en cuenta que era una simple comedia, me chocó las conclusiones que se sacaban al ver las dificultades que conllevaba gastarse esa cantidad de dinero en poco tiempo y, sobretodo, ser capaz de deshacerse de todo después.
Viéndola 20 años después, por supuesto se ve todo de una forma mucho más crítica: La cantidad de forma en la que una persona podría deshacerse de 30 millones de dólares de formas mucho más sencillas de las que propone la película, por ejemplo.
Pero en cualquier caso, la propuesta es divertida y los guionistas consiguen sacarle partido para conseguir una película realmente entretenida, al estilo de las películas de aquella época, en las que podías pasar un muy buen rato si no eras demasiado exigente ni crítico con el argumento, al contrario de lo que ocurre hoy en día, en que no dejamos pasar ninguna incoherencia, no sea que los demás piensen que somos tontos.
Como única crítica, diría que el final es un poco "chinpun" y que quizás unos minutos más de metraje tras la última escena habrían dejado una sensación de querer rematar un poco mejor la película.
En cualquier caso, una película muy recomendable para quien le guste el cine de los 80.
Ochentero
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
3
20 de octubre de 2015
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Ladrones. Nada menos que ladrones. Creo que con los tiempos que corren y lo que tenemos que sufrir con chorizos y mangantes varios, Hollywood debería ir con cuidado con películas que pongan a un ladrón como protagonista.
He visto pocas películas en las que se hacen malabarismos para que el ladrón pueda caer bien al espectador. Por ejemplo, en "Ocean's Eleven" utilizan la criminalización del personaje al que se roba para justificar ese robo y generar simpatía hacia el protagonista. Perfecto.
Pero cuando el ladrón o ladrones lo hacen de forma indiscriminada, a gente de la calle como tú, yo y cualquiera, y encima utiliza técnicas basadas en robar mientras alguien presta ayuda con, por ejemplo, un infarto, añadiendo además que se nos intenté vender de chulito que está forrado de tanto robar y no tiene necesidad alguna de seguir robando... El resultado es que cojas rápidamente manía al personaje y al mensaje.
A partir de aquí, ya ni tan solo me interesa la historia. Igual que no me interesaría una película que intentase ponerme de guay a un asesino, un violador o un terrorista. Ese tipo de personajes pueden ser atrayentes en ciertos films por el morbo de intentar analizar su naturaleza como puros observadores (ahí están por ejemplo las películas de mafiosos), pero no puedes intentar ofrecerlo como un héroe sin conseguir despertar (al menos para mi) una fuerte urticaria.
Ochentero
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
3
21 de mayo de 2015
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Soy especialmente aficionado al cine de viajes en el tiempo y paradojas temporales. Me divierten especialmente por lo que no es difícil tenerme entretenido con este tipo de historias.
"Los cronocrímenes" es claramente un proyecto de fin de carrera, una película de bajo presupuesto que aspira a generar un efecto en el espectador que no consigue precisamente por lo pretensioso del desarrollo.
El guión es un absurdo detrás de otro absurdo, situaciones sin sentido (Estoy de acuerdo con los que afirman que las escenas de desnudo están metidas con calzador para placer del director y los ojos masculinos) que no aportan nada a la historia y que no tienen una causa original. Simplemente "pasan cosas" que van de ningún sitio a ninguna parte.
Si los personajes evolucionan de una manera antinatural, con reacciones ilógicas, las interpretaciones no ayudan a hacerlas más creíbles.
En fin, una decepción que se saborea con la misma superficialidad con la que se desarrolla la historia.

En conclusión: Para olvidar.
Ochentero
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
1
10 de julio de 2019
22 de 42 usuarios han encontrado esta crítica útil
Stranger Things me está dejando, en sus 3 temporadas, un sabor agridulce. O mejor dicho, está incrementando el sabor agridulce que ya tenía.

Como nostálgico empedernido de la década de los 80 y toda su cultura, arte y sociología, considero una inmejorable noticia, no solamente que Netflix hiciese una serie ambientada en los 80 y que explote la nostalgía, sino que además haya tenido un éxito tan explosivo y generalizado, lo que provocará con toda seguridad nuevas series y películas que exploten la nostalgia de aquella étapa.

Pero hay una parte que me entristece y que aun se fortalece más en esta tercera temporada.

La sensación que me han dejado las 3 temporadas no es la de haber disfrutado dando rienda suelta a mi nostalgia, y me preguntaba porqué.

He llegado a la conclusión de que Stranger Things es una serie que homenajea y celebra, no tanto la década de los 80, sino el cine de los 80.

Y ese matiz es importante, porque eso significa que lo que importa más en la serie no es la ambientación o mostrar la sociedad de entonces, sino repetir escenas y cliches de las películas famosas de entonces. Lo tenemos en gran cantidad de situaciones que nos recuerdan escenas vistas antes en películas como Terminator o Regreso al Futuro, algunas llegando a lo ridículo por lo evidente.

Eso provoca una sensación de "historia conglomerada", una serie de cosas que se han ido uniendo para hilar una historia puesta al servicio de la revisión de escenas. Y en realidad creo que eso lo disfruta quien no ha visto esas películas porque es demasiado joven para haberlas visto y todo este tema de los 80 le resulta exótico y un mar de sorpresas. Por ejemplo, incluir un terminator en la serie, solo se le puede hacer sorprendente a alguien que no ha visto Terminator.

De hecho, la historia de esta tercera temporada recorre 2 lineas argumentales paralelas: Una dura y terrorifica y la otra cómica y con toques de surrealismo absurdo. El conjunto da una sensación de no saber si tomarte la historia en serio o en broma. Cualquiera de las dos serían validas, pero las dos a la vez es como comer bacalao con chocolate.

Esto se me hace más evidente cuando metemos el - incansable - tema del feminismo en barra. Cuando los personajes femeninos se rebelan contra los masculinos y tampoco nos queda muy claro si la gravedad de lo que han hecho y el porqué de las reacciones de odio y desprecio de ellas lo justifican.

La serie no evita meter la pullita feminista, siempre mostrado como un movimiento agresivo, basado en morder y ladrar con fuerza y justificando actitudes por parte de las mujeres de la serie que serían vistas como inadmisibles si las tuviesen los hombres. Es una lastima.

Porque en ese sentido, lo realmente entristecedor de esta tercera temporada es lo insoportables que son todos los personajes. Si en la primera temporada aun teníamos personajes que podían caer simpáticos, como por ejemplo el de Millie Bobby Brown, y teníamos que soportar el de Winona Ryder - absolutamente insoportable -, en esta tercera temporada no soy capaz de soportar a ningún personaje. Son todos absolutamente insufribles, y me paso el tiempo esperando que aparezca algún monstruo y los devore a todos.

Por último, la ambientación. Yo nací en el año 1981. Viví los 80 de forma intensa. Y no los reconozco en ningún lado en esta serie, en ninguna de las 3 temporadas. No reconozco las ropas, los decorados, las cosas. Echo en falta muchísimas cosas, especialmente en los excesos en las ropas, en la simplicidad de las diversiones de la gente, en una sociedad donde la gente se relacionaba de lo que se hace ahora. No sé si es porque en EEUU se vivieron otros años 80, pero tampoco reconozco los 80 que yo ví en las series.

Quien quiera ver cómo eran los años 80, que vea Glow. Stranger Things lo incluiría dentro de una tendencia actual que se llama "Vaporwave", un estilo artistico y gráfico basado en mezclar elementos vinculados a la cultura de los 80 y los 90 - indistintamente - de una forma tópica y exagerada, más basado en como un millenial percibe esa época. En Stranger Things solo salvaría la decoración del Centro Comercial, que creo que está conseguido, pero está resultando una serie llena de clichés que hará las delicias... de los millenials, esos que hablan de los 90 cuando se refieren a los 80 porque no saben situar exactamente en que década ocurrieron según que cosas.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Ochentero
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
10
1 de diciembre de 2019
4 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
Me encanta Woody Allen.

Debe ser que no he visto sus peores películas, porque todas las que he visto me encantan, y eso que se supone que aun me quedan por ver algunas de las mejores.

Me encanta pensar que tengo todavía una gran filmografía suya por delante.

Woody Allen es uno de esos artistas que gustan por su estilo. Desde luego, como cualquier artista, tiene trabajos más inspirados y otros menos, pero todos tienen el sello inconfundible del señor Allen. Un estilo reconocible incluso si empiezas a ver una película sin que te hayan dicho que es suya.

Me encantan sus historias con una trama bien estructurada. Sus dialogos. Su humor, por supuesto. Su preciosa e idealizada fotografía. Grandes películas en forma y fondo.

Es lo que ocurre con esta serie. Es Woody Allen en estado puro. Podemos discutir si es un trabajo mejor o peor, pero creo que cualquiera que disfrute con su cine, lo hará con esta serie.

Por desgracia, la serie sabe a poco, con solo 6 episodios de escasa duración. Es como una película suya un poco más larga, especialmente si como yo, te ves la serie del tirón.

Y si a eso le añadimos que ya tuvimos suerte de que Amazon no retirase la serie por las acusaciones de que es un monstruo machista y acosador, símbolo de la opresión del heteropatriarcado capitalista y fascista y no se cuantas cosas más, pues... es triste pensar que no podemos esperar una continuación o una nueva serie en Amazon Prime.

Por cierto, esta serie habla sobre eso. Una serie de lo más actual, donde se ironiza sobre todas esas revoluciones de salón y luchas sociales de burgueses acomodados en el esfuerzo individual de los demás. Nada más lejos de la realidad que nos toca vivir en nuestros días.
Ochentero
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 10 11 12 20 30 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow