Me encantan este tipo de películas de casting corales e historias entrelazadas y Pitt te vende su personaje al 100%, y el dúo encarnado por Taylor-Johnson y Tyree Henry (actor que llevo ya unos años reivindicando) suma aún más enteros a la ecuación.

David Leitch lleva un tiempo haciéndose notar y esta podría ser una de sus cartas definitivas.