Memada con sobre nota que engatusa a los incautos, cual ha sido mi caso. Los protagonistas, él y ella, hermanos, llevan vidas poco interesantes que, por alguna razón, el director nos cuenta tratando de que a los espectadores sí nos interesen.
Sus vidas ni les interesan a los personajes, que protagonizan tentativas de suicidio, ni nos interesan a nosotros.

El protagonista, actor frustrado, amante de su maestro en su juventud, sin nadie que le quiera en la actualidad, fracasa en su intento de suicidio y, como consecuencia, se les encaja en su casa a su hermana y su cuñado. Va y viene, merodea al que fue su amante y nos aburre con varias estampas domésticas con su hermana y su cuñado. Sin interés y sin humor.

En cuanto a la protagonista, hermana del muermo, repite su trayectoria, es decir, estampas domésticas, idas y venidas y, como único trasfondo dramático, un affaire con su profesor de buceo que pondrá fin a su relación marital. Poca tensión, poca pasión, poco ingenio y mucho tufo. Tufo a listillo que cree haber descubierto una buena historia.

Bravo por los actores que han cumplido con creces lo poco que les permitía esta bobada.

Las alabanzas que recibe por parte de los críticos desorientan al espectador más experimentado, cual es el caso de los seguidores de este portal, con todo, para eso estamos, para advertir al que pase por aquí. Cine de autor para vérsela él mimo en la intimidad y no fastidiar a otros.