Haz click aquí para copiar la URL
España España · Madrid
Voto de Feisal:
7
Drama Basada en una historia real. Después de haberse retirado del boxeo, James J. Braddock decidió volver al cuadrilátero, en la época de la Gran Depresión, para poder alimentar a su familia. No era un boxeador con talento, pero su coraje, sacrificio y dignidad lo llevaron hasta la cumbre. (FILMAFFINITY)
17 de junio de 2008
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Ron Howard siempre ha sido criticado (acertadamente) como un director blandengue y mediocre, y los temas y argumentos que siempre ha manejado han estado siempre bastante por encima de su calidad. En sus películas, nunca se le puede dejar de reconocer una gran factura y un cierto cuidado por las interpretaciones de sus actores. En general, sus filmes suelen ser entretenidos y muy bien hechos (destacando "Willow", "Cocoon", "Apolo XIII", la simplemente correcta "Una mente maravillosa" y ésta que nos ocupa), pero casi siempre adolecen de un pasteleo pringoso que tira para atrás, y unos guiones que, al ser facilones y simples cuando no deberían serlo, hacen agua por todas partes. "Cinderella Man" vuelve a contarnos la misma historia épica que tanto les gusta a Howard y a sus compatriotas, la del hombre que lucha ante las dificultades y se convierte en un héroe (contada también en la sobrevalorada "Una mente maravillosa"), en este caso se trata del boxeador Jim Braddock, quien triunfó en los años 20, pero que luego tuvo que apretarse el cinturon con el crack del 29 y la Gran Depresión, para, posteriormente, volver a remontar. Así, Howard tiene otra historia con la que viajar al pasado, a los años 20 y 30, y contar otras de sus historias de superación más grandes que la vida misma. Pero aquí, al contrario que otros intentos exitosos y olvidables como "Un horizonte muy lejano", la solidez, el rigor narrativo y la sencillez duran más de lo habitual. Entre sus puntos fuertes encontramos a Russell Crowe (gran actor y gran boxeador en la vida real, por lo que sabemos), quien encarna con precisión de relojería suiza a un Braddock honesto, sencillo, padre y marido fiel, y que se tiene que tragar su dignidad cuando su familia pasa hambre y frío. Crowe gustará más o menos, pero su interminable variedad de registros, y su puntería al clavar personajes más complejos de lo que parecen a simple vista le hacen grande. A su lado, el gran Paul Giamatti que, probablemente, sea el mejor actor de esta película. Si Crowe tiene mil registros, Giamatti posee un millón, y su interpretación del manager y entrenador de Braddock, el vitalista y animoso Joe Gould es una pequeña gran obra de arte. Perfecto, domina milimétricamente al personaje, sabe estar en su sitio. Una maravilla. Si el tercer vértice del triángulo fuera tan bueno como los otros dos, podríamos hablar de una gran película actoral.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Feisal
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow