Estupenda adaptación para la pantalla grande que dirige E. Lateste con gran acierto porque sabe imprimir al episodio una enorme solvencia cinematográfica y mantener en todo momento la frescura narrativa que Hergé había plasmado en el cómic.
La peripecia resulta entretenida y combina con habilidad la intriga, el sentido del humor y la aventura propiamente dicha de forma que el espectador siempre tiene la sensación de hallarse ante una película notable a pesar de su inequívoca y permanente referencia a las viñetas.
La animación es de corte sencillo pero elegante, la acción transcurre de un modo fluido y, en general, representa ese modo de hacer cine que compagina la mejor parte de cada uno de los elementos de que se compone.