Pues sí al fin parece que el siglo 21 ha encontrado al sucesor del Gran Lebowski, o el nota. Dicho esto esta película nos presenta a un poeta que vive de fiesta en fiesta, que logra reírse hasta de su propia sombra y entre abusos va escribiendo su nuevo éxito.

Película con un muy buen reparto, donde no sobra ningún actor ya que todos viven un desenfreno con el protagonista, un difícilmente reconocible Matthew McConaughey que poco a poco se abre paso en la industria no solo como una cara bonita, si no, como un grandísimo actor y muy camaleónico.

Este es un film que sin aportar nada que nos haga crecer nos divertirá, desde el principio al final apoteósico que tiene, muy muy recomendable.