El gran Costa-Gavras dirige nuevamente una película con un fuerte mensaje social tal y como nos tiene acostumbrado en su cine.
En esta ocasión nos plantea el tema del drama del paro, pero desde el punto de vista de un empleado que tiene un puesto importante en su trabajo, pero no es un directivo. Un hombre que vive una vida holgada, y que piensa que no tendrá problema de encontrar un nuevo trabajo; pero conforme pasa el tiempo comprueba que la realidad no es así; y su vida idílica se empieza a desmoronar.
La historia que plantea el director es bastante irreal pero sobre esa base real del paro. Digo irreal ya que no imagino que nadie por muy desesperado que se encuentre vaya a actuar como el protagonista. Es esa situación lo que hace cómico a este drama que por desgracia sufren millones de personas.
José García realiza una gran interpretación dando vida a este hombre que intenta por todos los medios conseguir ese puesto tan soñado en esa empresa llamada "Arcadia". Él realiza una actuación creíble, y nos presenta un personaje que intenta mantener muchas bolas en el aire para así poder obtener un futuro similar a su pasado añorado.
En fin, película que cuenta con un duro guión tratado con humor. Un guión que aunque cuente con momentos que no son tan efectivos como otros, hay que decir que funciona bastante bien, y uno se introduce fácilmente en una historia que engancha. Una historia que aun con altibajos, se disfruta, y se aprecia ese humor ácido con el que es tratado este tema tan dramático.