Saldadas las cuentas con la magnífica Terminator, rozada la gloria con "Aliens" pero desbordado tras el fiasco que supuso "Abyss", (la epopeya submarina de alienígenas y terror nuclear submarino) a Cameron no le tocó más remedio que volver al redil donde fraguó su éxito: Terminator.

Sólo que aquí vuelve con más pasta y más confianza en si mismo para elaborar un "remake" encubierto de su primera parte.

Si ya Terminator I era una gran obra de ciencia ficción labrada en los posos presupuestarios de la desaparecida Orion Pictures y Carolco. Aquí lo que tenemos es un Cameron desatado, consiguiendo elaborar un remake/secuela que marcó cátedra en lo que al cine de acción se refiere. Pues la ciencia ficción aquí pasa a un segundo plano, y se centra en desarrollar un poco más los personajes de Sarah Connor y el del T-1000

Arnold desempeña el papel de su vida, no es que sea mercedor de una estatuilla, pero su presencia escénica logra opacar incluso a Robert Patrick: sin tanto músculo logra demostrar que se puede estar también en muy buena forma y dar personalidad al villano con gestos y miradas asesinas.

Es como la primera parte, pero sin el encanto que supuso el debut exterminador del T-1000. Pero si por algo es recordada la película, es por lo bien rodada que está, y las muchas veces que ha sido copiada, (la escena de Matrix a la entrada del edificio con el tiroteo es prácticamente un plagio del asalto de Sarah Connor y el T-1000 a los laboratorios de Cyberdinne Systems)

Todos los personajes brillan con luz propia: Edward Furlong hace un gran papel como adolescente rebelde fanático de los Guns N' Roses, (perfecta la You Could Be Mine en la escena de la moto) Linda Hamilton evoluciona su personaje y da el toque dramático a la cinta, (lo que a la vez le da trascendentalidad y alma: algo de lo que carece el cine de Michael Bay y otros acólitos del maltrecho cine de acción) y, el Arnie... Pues qué decir de un tipo que rodó "Comando"? Arnold logra un gran papel haciendo de si mismo: machote musculoso, de gran presencia en la pantalla espetando cuatro palabras contadas del guión.

A día de hoy, aun habiendo pasado más de 20 años y con todas las secuelas bastardas estrenadas y por estrenar, se puede decir que si Terminator I es una de las mejores películas de Ciencia Ficción, su secuela/remake es quizás una de las mejores pelis de acción, (sin igualar la obra maestra de "Aliens")

Brad Fiedel mejora el score del original, tirando de sintetizadores y orquestación, lo que denota dos cosas: que la peli tenía pasta para poder contratar una orquesta y dos, que gracias a ello, la película no se ve lastrada por el anacronismo del uso de sintetizadores como sucede en las películas de los 80'. Que por cierto, Hans Zimmer, puede considerarse heredero mayor de Brad Fiedel.

En resumen: grandiosa epopeya de acción.