Contexto histórico

Y luego está el frío. Pero el frío con mayúsculas, estamos hablando de que en invierno las temperaturas mínimas pueden llegar a -20º. Los habitantes deben soportar estas temperaturas en casas a menudo dañadas y bombardeadas, en pueblos sin infraestructuras, agua o luz.

Además, no hay que olvidar que el enfrentamiento entre el este y el oeste en el espacio informativo ha adquirido un nivel de tensión extrema. Los expertos de ambos bandos recurren cada vez más a la narrativa de la guerra fría, a sospechar unos de otros, tergiversar, y si hace falta, se recurre a la mentira, haciéndose difícil encontrar en los medios de comunicación una información veraz y objetiva.

Donbass: donde la guerra se esconde bajo el nombre de paz

Sergei Loznitsa nos muestra sin paños calientes en este film la cruda realidad de una región maltratada por una guerra sin nombre. Realizada con un cierto aire documental y articulada en doce episodios entrelazados entre sí, exhibe de forma satírica, esperpéntica o a veces terriblemente real, la terrible cotidianidad de la guerra, los registros indiscriminados, la pérdida de la identidad, la ausencia de los mínimos derechos humanos o incluso la apropiación de la propiedad por parte del Gobierno.

Con unos planos secuencia espectaculares y una fotografía excelente nos sumergimos en el caos de una sociedad destruida y alineada, maltratada por las fuerzas armadas de los dos contendientes en la liza y en la que la mentira ocupa un papel preponderante en el día a día de unos habitantes que bastante tienen ya solamente con saber si van a comer, a dormir o a conservar la suficiente temperatura para no morir congelados.

Una notable ausencia de diálogos, que en algunos casos hace que algunos pasajes se hagan largos, y el hecho de que el director no nos haga empatizar con ningún personaje en especial, influyen en algunos momentos en restar fluidez al resultado final de una cinta en la que por otro lado, la crudeza de las imágenes y la serenidad con que los habitantes de Donbass aceptan las tropelías que se cometen contra ellos, sobrecoge sobremanera al espectador.

Por otra parte, esos magníficos paisajes nevados que el cineasta nos ofrece, contribuyen a que comprendamos el terrible modo en que viven los habitantes de Donbass, con una temperatura de -20º, en unas precarias soluciones habitacionales, sin higiene ni forma adecuada de calentarse.

Conclusión

En Donbass han desaparecido muchas cosas, pero lo primordial que ha desaparecido es la humanidad, siendo sustituida por el odio, la humillación, la mentira y la desesperación.

Esta película es un grito desesperado, una ventana abierta de par en par al mundo para dar visibilidad a esta zona, que tapada por otros conflictos como la guerra de Siria, la catástrofe migratoria mundial o, atentados yihadistas, sufre en silencio la brutalidad de un conflicto que se ha llevado por delante su vida, sus ilusiones y su dignidad.

Escrito por Luz Nogués
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