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Voto de Del_Pier0:
56.482
Romance. Drama
Ben Sanderson (Nicolas Cage), un guionista alcohólico, acaba de perder su trabajo en Hollywood debido a que sus problemas con la bebida afectan a su rendimiento. Sin amigos y sin familia, decide ir a Las Vegas con el propósito de beber hasta morir. Nada más llegar a la ciudad, conoce a Sera (Elisabeth Shue), una atractiva prostituta que trabaja en la calle de la que se queda prendado. (FILMAFFINITY)
14 de abril de 2011
6 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
‘Leaving Las Vegas’ es una película bastante cruda, muy cruel, diría que hasta morbosa y fetichista.
La premisa no puede ser más jodida: un alcohólico desganado de la vida es botado de su trabajo por esos malos hábitos, y decide irse a Las Vegas a suicidarse... bebiendo. Tan épico y mordaz como suena.
A partir de ahí empieza su segunda vida (una segunda vida intrínsecamente imposible para un hombre que ya hacía tiempo se rindió ante ella) cuando conoce a una prostituta llamada Sera quien, por casualidades o desgracias del destino, ha llevado un camino parecido al de nuestro protagonista pero con la prostitución de telonera.
Se enamoran y ahí radica todo el encanto y el interés de la película. Poco más se puede contar, sino disfrutar de la extraña relación que mantienen estos dos personajes y de los diálogos.
Un guión muy inteligente que parte y navega con las condiciones necesarias (una prostituta y un alcohólico sin remedio) para marcarse un genial drama sobre la ACEPTACION tal y como somos, incondicionalmente, hasta en el estado más perro.
No puedo sacar otro mensaje cuando Nicolas Cage espeta como única e imprescindible condición que, para poder estar juntos, ante todo “nunca me pidas que deje de beber”.
Hay que tener varias cosas claras antes de ver ‘Leaving Las Vegas’: no te vas a reír mucho. Lo más probable es que se te formen nudos en la garganta durante todo el film. Y es una de las pocas notas ‘negativas’ (por decirlo así, porque es un drama y como tal...) que tiene: en esta película no te vas a encontrar un aliento sobre la vida, las segundas oportunidades o el resarcimiento. Vas a ver el crudo y feroz retrato de dos personas en el ocaso de sus vidas. No es una película para nada agradable, lo cual creo que es su propósito, y como tal lo ha conseguido.
Y la segunda nota negativa, y esta vez sin comillas, va para Nicolas Cage. No es que hiciera un mal trabajo o que no justifique su nominación al oscar, pero se me ocurren bastantes actores que podrían haberlo hecho mucho más épico y mejor. Por ejemplo y a pedir de boca, Jeff Bridges.
Por lo demás, una de las mejores películas del año.
“Aparte del olor a alcohol y del algún babeo ocasional, algunas veces dices cosas muy interesantes”
(Acto seguido Sera le regala una petaca. Apabullante)
La premisa no puede ser más jodida: un alcohólico desganado de la vida es botado de su trabajo por esos malos hábitos, y decide irse a Las Vegas a suicidarse... bebiendo. Tan épico y mordaz como suena.
A partir de ahí empieza su segunda vida (una segunda vida intrínsecamente imposible para un hombre que ya hacía tiempo se rindió ante ella) cuando conoce a una prostituta llamada Sera quien, por casualidades o desgracias del destino, ha llevado un camino parecido al de nuestro protagonista pero con la prostitución de telonera.
Se enamoran y ahí radica todo el encanto y el interés de la película. Poco más se puede contar, sino disfrutar de la extraña relación que mantienen estos dos personajes y de los diálogos.
Un guión muy inteligente que parte y navega con las condiciones necesarias (una prostituta y un alcohólico sin remedio) para marcarse un genial drama sobre la ACEPTACION tal y como somos, incondicionalmente, hasta en el estado más perro.
No puedo sacar otro mensaje cuando Nicolas Cage espeta como única e imprescindible condición que, para poder estar juntos, ante todo “nunca me pidas que deje de beber”.
Hay que tener varias cosas claras antes de ver ‘Leaving Las Vegas’: no te vas a reír mucho. Lo más probable es que se te formen nudos en la garganta durante todo el film. Y es una de las pocas notas ‘negativas’ (por decirlo así, porque es un drama y como tal...) que tiene: en esta película no te vas a encontrar un aliento sobre la vida, las segundas oportunidades o el resarcimiento. Vas a ver el crudo y feroz retrato de dos personas en el ocaso de sus vidas. No es una película para nada agradable, lo cual creo que es su propósito, y como tal lo ha conseguido.
Y la segunda nota negativa, y esta vez sin comillas, va para Nicolas Cage. No es que hiciera un mal trabajo o que no justifique su nominación al oscar, pero se me ocurren bastantes actores que podrían haberlo hecho mucho más épico y mejor. Por ejemplo y a pedir de boca, Jeff Bridges.
Por lo demás, una de las mejores películas del año.
“Aparte del olor a alcohol y del algún babeo ocasional, algunas veces dices cosas muy interesantes”
(Acto seguido Sera le regala una petaca. Apabullante)
