Hay cosas muy buenas y otras no tanto en este último trabajo del director de “Deadpool” y “John Wick”, David Leitch. Entre lo bueno y por encima de todo está su reparto, creo que no hay ninguno que quede por detrás del otro, es una barbaridad. Desde Brad Pitt hasta el último de los personajes cumplen con nota , aunque la pareja de sicarios, “mandarina” y “limón”, interpretados por Brian Tyree Henry y Aaron Taylor Johnson, se llevan todos los honores.

¿Te imaginas subirte al mismo tren que lleva a cinco de los sicarios mas implacables del mundo? Pues el panorama no podría ser mas desalentador y obviamente el resultado está a la altura de lo esperado, hay diversión, acción y mucha sangre, pero es inevitable la comparación continua con el talento de Tarantino y aquí la película sale perdiendo. No llega al nivel de emoción que me produjeron todos los personajes de “Kill Bill”, ni de lejos y aunque el resultado para mí es satisfactorio, está por debajo de “Érase una vez en Hollywood”, “Los señores de la mafia” o “Malos tiempos en el Royale”, por poner las últimas vistas del mismo género.

A pesar de su irregularidad y lo excesivamente rocambolesco de muchas de las decisiones, este tren bala es una atracción irresistible a la que si te subes, ya no vas a poder bajar hasta el final del trayecto; ¡Ojo!