La obra de Moore no deja títere con cabeza, las armas, la corrupción política, escándalos electorales y ahora la sanidad. La situación de la sanidad de la primera potencia del mundo es desoladora. Viendo este documental y ante el autismo de la sociedad norteamericana es como para salir corriendo de allí.
¿No hay una base social que reaccione ante tanto mamoneo?.
Parece ser que no, mientras tanto algún que otro ciudadano de USA intentará que las cosas cambien, y seguramente se le tachará como a Moore de izquierdista o de antiamericano.
Gente como el, a pesar de su exhibicionismo, son necesarios y poco a poco, tal vez de aquí a un tiempo la gente reaccione, abandone su conformismo, y el mundo mejore aunque sea un poquito.