¿Cual puede ser la causa del éxito inmediato de una película tan arriesgada? Quizás porque la historia y la definición de los personajes resultan familiares, puesto que se trata de situaciones muy parecidas a las películas de Star Wars, y, sobretodo, en el tratamiento de los protagonistas.

Tenemos a un Han Solo (Starlord) con su propio Halcón Estelar, mercenario y ladrón, que debe dinero a su propio Jabba (Yondu), lider de una organización de saqueadores. Muy similar. Pero hay más. La pareja cómica R2D2 y C3PO se ve recordada por el mapache Rocket y el hombre árbol Groot; Chewbaca- grande, fuerte y poco hablador -tiene su clon en Drax el destructor, Gamora podría ser la princesa Leia, o quizás correspondería a Luke Skywalker, en el fondo idealista y enfrentada a su padre maligno. Y luego están los malos; tenemos a nuestro Darth Vader (Ronan el acusador) señor oscuro que rinde vasallaje a una especie de Emperador (Thanos). Y tienen un aprendiz, Nébula, el equivalente de Darth Maul. Todo, todo, muy conocido.

Y seguimos con los símiles; existe un cuerpo de policias espaciales, los xandarianos (¿o más bien los Jedi?) con su propio Yoda (en este caso Nova-Prime). Y luego está el destructivo final, muy similar a la original Star Wars ... Con todo ello, y aunque hay diferencias, flota en el ambiente un regusto ya conocido, algo que subliminalmente gusta al espectador (¿a quién no le gusta Star Wars?).

Si buscamos referencias con el mundo de los comics, nos llevaremos una cierta decepción. Estos guardianes no son los originales que yo leía en los comics Vértice y que luego fueron defenestrados por una mediocre continuación en los años 90, víctimas de un tal Jim Valentino como guionista. El posterior reboot en el que se basa la película tampoco es fidedigno. Y no hablemos del comic Star-Lord, cuyo tratamiento en la película es completamente herético y ofensivo para los paladares comiqueros. Así Yondu era el último superviviente del planeta Centauri IV, alguien noble y enraizado con la naturaleza, no era un vulgar saqueador de dientes horrendos; Star-lord era un caballero espacial, una especie de Green lantern único, un justiciero, con su propio mentor, tampoco era un saqueador ridículo. En los actuales Guardianes había más miembros: Mantis, Warlord, Vance Astro e incluso Bicho y Nova. Ni uno salen. Y el tratamiento de los xandarianos y el cuerpo Nova es tremendamente discutible. Y Drax, personaje maltratado en los comics, quizá es el más parecido en el filme. Respecto al Coleccionista, queda como un triste bufón y del perro Cosmo ni hablamos ...

La película bate en un minipimer con esmero un montón de personajes, situaciones, ambientes e historias procedentes de los comics. Si lo pruebas sabe bien, a una especie de mezcla con múltiples y distintos sabores de los comics Marvel.

La realización de la misma es vertiginosa, James Gunn tiene brio y se cree la película que el mismo ha escrito. Sucesión en cascada de aventuras y acción, dificilmente te puedes aburrir en este ejercicio magistral de space-opera. Mil veces recomendable, pero si eres un comiquero, deja fuera tus recuerdos del comic, esto es otra cosa.