13 años después del estreno de Buscando a Nemo, volvemos al mar de Pixar con Buscando a Dory. En esta secuela Dory vive una apacible vida junto con Marlin y su hijo Nemo. Pero cuando en un viaje para ver cómo las mantarrayas migran de vuelta a casa, el problema de memoria de Dory parece desaparecer de durante un segundo: recuerda que tiene una familia y decidirá en ese momento partir en una aventura para reencontrarse con sus padres, a los que perdió años atrás, como siempre os digo la sinopsis oficial.

La película enlaza perfectamente con la primera entrega, esta vez comenzamos con Dory, donde vemos un resumen de su vida hasta que se encuentra con Marlin, para después situarnos un año después de los acontecimientos de la anterior entrega. Como reza la sinopsis Dory tendrá un momento de lucidez y decide buscar a sus padres.

A partir de este punto y con una Dory que actúa por impulso, sin pensar en nada mas que en encontrar a su familia, comienza una aventura en la que irán metiéndose de lío en lío. Tenemos una persecución genialmente realizada, hasta que Dory es llevada al Instituto de Vida Marina de Monterrey, (divertido momento la manera de capturarla).
Aquí la trama inicial se convierte en dos, la que sigue a Dory en busca de sus padres, y la que sigue a Marlin y Nemo en busca de Dory, ambas perfectamente unidas. Por un lado Dory intentando encontrar a sus padres con ayuda de Hank. Me gustó mucho que en esta secuela salieran un poco del mar abierto para tener que estar dentro del instituto marino, eso dificulta las cosas a la hora de desplazarse y por tanto, tienen que buscar la manera de hacer que ellos puedan realizar lo que busquen.

Esta entrega me parece mucho mas emotiva que la anterior, conocemos mas a Dory en profundidad, dándole importancia a su problema de perdida de memoria, los flashbacks de ella como bebe son...lo mas tierno y a la vez triste que he visto en mucho tiempo y tiene momentos en los que es complicado no soltar una lagrimilla. Eso no significa que no sea divertida, al contrario, tiene muchos momentos y escenas cómicas que involucran a gran parte de los nuevos personajes, estos están genialmente integrados en la historia, cumplen muy bien su función, y dan mucha frescura a esta secuela.

Y tratándose de un producto Pixar no puedo dejar de lado su calidad visual y técnica. Si Nemo ya se veía perfectamente, en esta aún van mas allá y el acabado tanto de paisajes, como de personajes es prácticamente perfecto. La BSO me ha parecido muy buena, sin nada que envidiar a la de su primera entrega, y se funde muy bien con la película.

Termino pues, magnifica secuela, para mi mas aventurera y emocional que la primera entrega, con escenas muy divertidas aderezadas con escenas con las que nos lograran tocar la fibra sensible. Lo mejor, poder ver a esa Dory bebe tan entrañable y el ritmo frenético de la parte final del film, además de su discurso. Para mi es un 9.