Haz click aquí para copiar la URL
España España · Córdoba
Voto de Talía666:
3
Drama. Romance Jenny, una atractiva y brillante estudiante de 16 años (Carey Mulligan) que vive en un tranquilo barrio londinense, sólo piensa en estudiar para poder ir a Oxford. Pero un día conoce a Brit (Peter Sarsgaard), un tipo seductor de 35 años, que la corteja con cenas elegantes, clubs y viajes con sus divertidos amigos Danny (Dominic Cooper) y Helen (Rosamund Pike). Así las cosas, las convicciones de Jenny se tambalean y se verá obligada a ... [+]
26 de abril de 2011
11 de 18 usuarios han encontrado esta crítica útil
La película parte de una base ya de por sí falsa: la vida de estudiante es aburrida. Los estudiantes no van a conciertos, no salen de copas, por supuesto no follan ni se compran ropa ni nada de nada. Por consiguiente, si aparece alguien en tu vida que te hace experimentar todas esas cosas tan ajenas a la vida estudiantil es lógico que se te vaya la pinza y decidas dejar todas tus expectativas académicas y profesionales para correr en pos de ese sueño dorado.

Se ve que esta directora no ha pisado un instituto o una facultad ni sabe lo que es un Erasmus ni ha visto a un estudiante en toda su vida. Los estudiantes lo que van siempre es tiesos de pasta, eso sí es verdad, pero ni falta que les hace porque ya se las apañan ellos para beber, comer, divertirse, ver cine, ir a conciertos y follar de gañote o por lo menos a precios bastante módicos. Y si no, pues se hacen una botellona y oye, tan agustísimo.

Sin embargo para que funcione esta estrambótica historia de estudiantes que no hacen otra cosa que estudiar, la directora tiene que recurrir a un colegio privado de normas superestrictas, a una niña cerebrito, a unos padres medio subnormales, a una profesora tipo señorita Rottenmeyer, a un bon vivant ocupado en negocios turbios, a unas amigas de la protagonista que parecen recién sacadas de "Historia de una monja" y a unos amigos del protagonista que parecen recién sacados de "El gran Gatsby". Y así, con todo este cúmulo de elementos imposibles, casi casi consigue convencer al espectador.

Ah, que no se me olvide. La niña además tiene que ser de ese tipo tan usual de niñas que celebra ella sola su cumpleaños con sus padres sin fiestas ni amigas ni nada; sí, hombre, esas niñas a las que suelen regalar diccionarios de latín por su cumple. Ya sabéis, si están a la orden del día.

En fin, que para que a esta mujer la historia le cuadre se ve obligada a incluir una serie de despropósitos tales que sólo desde el surrealismo más extremo o desde la ebriedad más destroyer se puede concebir semejante cantidad de pegos juntos.
Talía666
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow