Tenía muchas ganas de ver esta película, creí que iba a ser una una continuación de Johnny Week, en el mismo escenario del hotel y con los mismos códigos de hotel y de las monedas, pero no. Es del mismo guionista y algo sí que se nota en la manera de tratar la violencia y al héroe protagonista.
A ver, es una comedia de acción, absurda y sin sentido, pero es un buen entretenimiento que no inventa nada, no aporta nada nuevo al género de violencia, un hombre solo contra una banda de mafiosos con un jefe malísimo y más loco que Croqueta. Mas que a la trilogía de Keanu Reeves se parece a Payback, gran película.

La premisa de que un hombre de acción tranquilo y retirado, necesita volver a sentir la violencia y demostrar a su familia que no es un cagón. Un lobo con piel de cordero que demuestra poco carácter en el momento en el que busca meterse en líos por pura satisfacción personal, ni siquiera por hacer justicia. ¿a quién se le ocurre poner en peligro a todos sus familiares por un calentón?

Lo mejor de la película y solo por sus trabajos anteriores, merece la pena ver a Bob Odenkirk en el papel protagonista, un descubrimiento cuando hizo un secundario tan inolvidable que acabo teniendo su propia serie. Uno de los mejores actores del panorama actual, en un papel de héroe de acción en el que es inevitable compararle con el guapo Reeves y que resuelve con maestría las escenas de lucha y además da a su personaje una personalidad de tipo duro que otros actores de acción no le dan por ser absolutamente inexpresivos.
El ruso malo-loco es Aleksey Serebryakov, un gran trabajo el de este actor que se mete en la piel de un mafioso extravagante y exhibicionista que me recordó al personaje de De Niro en Casino, pero en violento y psicópata.
La mujer del héroe es Connie Nielsen, que aunque ya no juega en Champions, sigue interpretando papeles de mujer madura que conserva su belleza.
El que no conserva su figura es Michael Ironside al que ni siquiera le había reconocido en el papel de suegro gilipollas, resulta más divertido su hijo en la ficción que hace un divertidísimo papel de cuñado gilipollas.
Colin Salmon en el papel de hermano retirado que se apunta a la fiesta y que protagoniza la escena de la pistola que es de las mejores que recuerdo en una película de acción.
El peor del reparto y eso que tiene una buena escena en el asilo, es Chistopher Lloyd, quizás demasiado cómico para otro actor anciano habría dado más seriedad a esta comedia de acción en lugar de parecer al final una película de risas y bofetadas.

Lo que si es cierto es que tiene unos muy buenos efectos especiales, unas muy buenas persecuciones, peleas, tiroteos y un buen manejo de los tempos, donde a pesar de ocurrir todo muy rápido, el director pausa la acción para que Bob Odenkirk pueda lucirse y demostrar que si quiere, Saul Goodman tiene bemoles para hacer de tipo duro.