Y la siguió la que en ese momento no sabíamos que sería la última película del día: la palestina The reports on Sarah and Saleem/Al-Taqareer hawl Sarah wa Saleem, merecedora del premio del público en el último Festival de Rotterdam. Jerusalén. Sarah, judía, trabaja en una cafetería en el oeste y comparte hija con un militar de las fuerzas israelitas. Saleem es un palestino cuya mujer espera un hijo y que trabaja como repartidor. Ambos viven un romance en la nocturnidad de los parkings y del camión de él. Pero el día que ambos sean vistos juntos al otro lado del muro, se precipitará un aciago malentendido político de funestas y violentas consecuencias que afectará a sus respectivas familias y no podrán controlar. Un drama intenso sobre las aciagas tensiones entre Palestina e Israel, y del desgraciado conflicto entre ambos, desencadenado aquí por un simple adulterio sin ninguna implicación política. Una película más que correcta, competentemente facturada y construida con trabajo, logrando un buen trabajo de su reparto y una intensidad trágica que implica a todo espectador. Un drama que no ofrece nada nuevo que otras películas palestinas o iraníes no hayan dado antes, instaurándose dentro de dogmas de estilo muy definidos. Su realización es simple e impersonal, su metraje es excesivo y el argumento es predecible y bastante sobre-explicativo. Una película lejana a la excepcionalidad, pero muy trabajada.