Lo que nadie podrá negar es la actuación de Jack Nicholson. Está impresionante, ralla la perfección en una interpretación de este calibre. Está que se ale. Creo que todo el mundo estará de acuerdo.

Quizás, lo que muchos no lo estén es sobre Shelley Duvall. A mí encanta como lo ha hecho, aunque claro está, que después de saber que Kubrick la presionaba al límite para tener una interpretación brillante, ya me pareció una locura y tortura para ella. Pero quizás sea macabro al decir que valió la pena, porque para mí está brillante. Un personaje frágil, que mantiene la cordura y actúa así de bien... El niño también fenomenal, vaya caras que ponía...

Las escenas míticas, pues son míticas. El final no me gustó mucho por dejarlo así... Pero ya es una película de culto y verla ahora, quizás no cause terror, pero sí fascinación.