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España España · Madrid
Voto de yoparam:
7
Drama Basada en la novela homónima de Pérez Galdós. Marianela, una joven huérfana y poco agraciada que ha sido acogida caritativamente por una familia, dedica su tiempo a cuidar a Pablo, ciego de nacimiento e hijo del dueño de las minas. A través de Marianela, el joven llega a imaginar cómo es el mundo y se enamora de su cuidadora, a la que cree muy hermosa, pero ella, aunque también lo ama, no quiere que él sepa cómo es. (FILMAFFINITY)
6 de septiembre de 2020
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Reconozco una deformación cinéfila: me gustan más las películas antiguas (años 30, 40, 50 y 60) que la mayoría de las modernas, sobre todo porque suelen ser más inocentes e ingenuas, sin eso de “ir de listos” o de basto que se da mucho en el cine desde los años 70.
Así que no puedo más que disfrutar de esta maravilla, a pesar de la modestia de la puesta en escena.
La novela de Galdós es de las mejores de él. Esta Marianela, lazarillo de Pablo, un joven ciego, es como la hija de aquella Benina de “Misericordia”, otra gran novela de don Benito.
Mary Carrillo y Julio Peña bordan el papel. Los diálogo son de Joaquín Álvarez Quintero, que de teatro sabía y esta peli tiene mucho de teatro, para bien. Y me gusta ver a Jesús Tordesillas cuando tenía cuarenta y tantos, tantas veces como le he hemos visto de viejo.
Hay escenas muy buenas como el derrumbamiento de la mina y el rescate de Pablo.
La música es nada menos que de Jesús Guridi.
Y esto se hizo en 1940, un año después de terminar la fatídica y fratricida guerra. No era mala época para difundir buenos sentimientos.
Otra cosa más: esta película con ya (2020) 80 años tiene mejor sonido que muchas que se hacen hoy mismo.
Y lo que tiene de documental de las minas, del trabajo en el campo, como vivía la mayoría de la población entonces.
Comparación en labios del ciego: “Las flores son como las sonrisillas de la tierra”. Galdós, que sabía, suelta nada menos que esto: “la belleza es el resplandor de la verdad y de la bondad”. Lo decía también Keats: “La belleza es verdad y la verdad belleza”. En su modestia, Marianela es eso.
yoparam
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