Sobrecogedor retrato de la especie humana, de sus miserias y sus fortalezas a través de la cara más desfavorecida de una sociedad filipina y dos de sus abuelas, abuelas coraje, que encarnan la lucha por la supervivencia física y moral. Cine social y de denuncia que abre una ventana a la realidad de millones de personas que como estas abuelas cargan con el peso de un mundo donde todo se compra y se vende, donde tanto tienes tanto vales y donde los dioses siguen prometiendo desde sus floridas estampas, que tras la muerte se nos recompensaran tantas desdichas. Brillante mueve la cámara con la maestría de aquel que conoce o sabe perfectamente lo que quiere contarnos con una aparente sencillez que nos convierte en espectadores de primera fila, casi acompañantes de la peripecia vital de estos seres y de su entorno. Nos acerca a una filipinas desconocida para el público mayoritario, fotografiada con aplomo en sus luces y aguas grises y lluvias torrenciales. La escena final en el restaurante no tiene precio y nos provoca tantas sensaciones....