El éxito de una película hace que, inmediatamente, los productores, directores o actores involucrados quieran repetirlo de alguna forma para mantenerse en la cresta de la ola y, casi siempre, se intenta copiar la fórmula de lo que funcionó. A veces se da en la tecla y a veces no, por distintos factores. Así, nos encontramos el caso de la fallida ‘Criaturas feroces’ que, manteniendo el equipo de la genial, divertida y soberbia ‘Un pez llamado Wanda’ quisieron recrear la misma jugada, pero se olvidaron por completo de acompañar los gags con un guión.

Uno ve ‘Criaturas feroces’ con una sonrisa esforzada, buscando que el resultado le haga gracia sin éxito, porque de lo primero que te das cuenta es de que no hay un buen libreto de bajo que sea capaz de dar soporte a los chistes y gags que pueblan la cinta y que van pasando con más pena que gloria. La historia de este zoo no atrapa, apenas tiene emoción y tiene mucho de predecible.

Si te fijas en los distintos personajes que interpretan los John Cleese, Kevin Kline y demás, son casi un calco de los personajes de ‘Un pez llamado Wanda’, por lo que todo el mundo está cómodo repitiendo roles.

Así, ‘Criaturas feroces’ es sosita, muy sosita. A veces copiar, aunque parece el camino más fácil, termina resultando caro.

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