Con un tono teatral, nos muestra a unos actores en estado de gracia, en principio charlando sobre los tiempos pasados en su Cuba natal, pero poco a poco se van abriendo y sale a relucir todo.
Como les jodieron la vida, por qué uno de ellos se tuvo que ir de allí y a todo lo que tuvieron que renunciar.
La falta de libertad hizo que dos de ellos perdieran su creatividad, uno escribiendo y otro pintando.
La película te llega y te entristece con las vivencias de los protagonistas.