Menudo sorpresón. La mejor película de lo que va de temporada en este año 2014, con mucha diferencia. Una extraordinaria película.

La película guarda muchas similitudes con lo mejor de Atrapado en el tiempo (El día de la marmota), Matrix y Alien, pero aún con todo, nos encontramos con una historia completamente original, y es con diferencia la película más redonda que he visto en bastante tiempo. El director (extraordinario Doug Liman) consigue crear una trama coherente, muy interesante e inteligente (por fin), y completamente original, donde te ríes, te emocionas, y disfrutas todo el tiempo de una historia bien contada y de unos personajes magníficamente bien definidos.

Una magnífica historia, un buen guión, unos magníficos actores, un más que creíble Tom Cruise (que por fin se marca un claro cambio de registro), una historia bien estructurada y montada. Una gran película. De largo, el mejor estreno de lo que va de 2.014, y una inyección de moral ante los paupérrimos estrenos en lo que va de año.

La verdad, tenía miedo, y no esperaba mucho de Tom Cruise (no lo soporto en ninguna de sus últimas películas), pero en esta película hay que reconocer que lo borda, que te lo crees, y que está muy metido en el papel. Emily Blunt es una diosa en su papel. Sin ella la película no sería lo mismo, y se marca uno de esos inmensos papeles, que se agradecen en una película de acción. Una inmejorable elección para un papel difícil, lleno de matices, y que no deja de sorprender durante las dos horas de metraje.

Además, la química no falta entre estos dos actores, muy metidos en sus respectivos papeles, pero además este dúo está rodeado de un gran elenco de secundarios (Bill Paxton, Brendan Gleeson, y toda la escuadra en general), que completa perfectamente una historia de corte íntimo, que traslada el magnífico comic en que está basada, en una experiencia cinematográfica de primerísimo nivel.

Una película que es capaz de mezclar la acción más adrenalítica, con magníficos gags de humor negro, y con escenas en las que no falta algún que otro momento íntimo. Es difícil expresar la satisfacción que produce ver un montaje tan bien hecho, y una dirección soberbia, que nos lleva durante dos horas, a recrear las continuas peripecias del personaje principal, con una trama que tiene su suspense, y que a pesar de lo repetitivo, en ningún momento resulta cansina ni aburrida, sabiendo intercalar la repitición obligada de cada día, con nuevas situaciones y acontecimientos, consiguiendo incluso momentos hilarantes, sin que la historia se resienta ni pierda su naturaleza, esencialmente de película de ciencia ficción y acción.

Y encima tiene unos efectos especiales de primer nivel, que se usan exclusivamente en beneficio de una buena historia,

¿Se puede pedir más? No lo sé. Pero es un lujo de película. Deja el listón para lo que queda de año, muy, muy, pero que muy alto.