La crítica de esta película es sencilla de escribir, estamos ante un metraje cuidado al detalle y que tiene todos los planos y fotogramas perfeccionados para una elegante presentación audiovisual.
La banda sonora es magnífica, la música crea un ambiente único y fascinante. Y se conecta perfectamente con el hilado de una trama perfecta y que atrapa completamente, llena de metáforas visuales y una elegancia maravillosa con el devenir de los acontecimientos. Unos acontecimientos que no dejan indiferente y que se graban en nuestras retinas con gran detalle y como bellas imágenes, estampas que se graban en la memoria dejando que una película maravillosa e inolvidable deje su huella en nuestras mentes.

La fotografía y dirección son absolutamente perfectas, y me parece incompensible que no se haya llevado los Óscars a estas dos categorías cuando creo que es la película con mejor fotografía que he visto en mi vida.

La trama es perfecta, su desarrollo lento pero hilado y con gran claridad, sutileza y cuidado en los detalles... Me parece única e irrepetible, una historia grandiosa que se presenta como un regalo para los espectadores. Auténtico y majestuoso cine en estado puro, un gran tesoro cinematográfico que apreciar y disfrutar, una experiencia que hace gozar a los cinéfilos que buscamos vernos envueltos en una gran historia y maravillarnos hasta con los más pequeños detalles.

Antes de terminar, debo mencionar las interpretaciones pues son absolutamente perfectas y son de las más creíbles que he visto. Un gran trabajo interpretativo por parte de todo el reparto.

Es una de mis películas favoritas sin ninguna duda, es una película perfecta.
Es una obra maestra que merece infinitamente más reconocimiento y que debería ser considerado como una película de culto. Esto es arte llevado a la perfección y plenitud.