Haz click aquí para copiar la URL
España España · san sebastian
Voto de Izeta:
8
Western. Drama David Harvey (William Holden) es un granjero viudo que vive con su hijo Davey en una aislada granja de Ohio. Quiere proporcionarle a su hijo la educación que su madre hubiera deseado para él, es decir, una educación que lo convierta en un caballero. Además David decide casarse con Rachel (Loretta Young), una sirvienta, para que se ocupe de las tareas domésticas y cuide de la educación del chico. Sin embargo, Davey no siente un verdadero ... [+]
25 de noviembre de 2020
6 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
Delicioso western de trasfondo romántico que, con ese sabor de dulce clasicismo, bello y armonioso nos sumergen en una historia sencilla pero no menos interesante e insólita.
William Holden es un granjero recién enviudado con un hijo pequeño que vive en las montañas. Aislado del mundo, recibe la visita ocasional de un amigo, Robert Mitchum, un cazador solitario y de vida errante.
La vida asilvestrada y salvaje que está llevando y en la que su hijo se está criando, pronto le convencerá de que necesitan una mano femenina que establezca un hogar para su hijo y ponga un poco de orden.
Y tiene suerte. En el pueblo encontrará a una muchacha ( Loretta Young), cuya condición de sierva le va que ni pintado ya que con poco gasto, exactamente 18 dólares al contado y 4 más en diferido, podrá contar con una casi esclava que le solucione la papeleta. Claro que, en esas tierras se vive en el temor de Dios y comprar a una persona no está mal visto siempre y cuando se pase por la vicaría.
Este insólito argumento, no debía ser tan extraño en aquella época. La figura de los siervos todavía debía ser legal entonces. Al parecer, en este concepto heredado de la época feudal, las personas podían caer bajo ese régimen de semiesclavitud por las deudas contraídas y sus acreedores adquirían derechos sobre ellas aunque no perdieran su condición de ciudadanos libres. Lo que no me queda claro es, cuándo se suponía que una persona había saldado su deuda con su señor, si bajo esta condición, en ningún momento percibían ningún salario remunerado. Trabajaban sólo con derecho a comida y techo.
Pero al lío. Un reticente o tímido, no se sabe bien, Holden, desposa a una agradecida Young que se cree por un momento, salvada de su condición. Craso error. A su llegada a la granja comprobará cómo es su condición de sierva lo que ha comprado este hombre y que la boda es una mera formalidad. El niño tampoco ayudará ya que cree que esa mujer ha venido a suplantar a su madre.
La visita de Mitchum a la granja empezará a abrir los ojos del granjero cuando compruebe que su amigo sabe apreciar cualidades en su sierva que él ignoraba que poseía. Claro que, Young no sé si se siente muy halagada al comprobar que el aprecio por su persona sólo sirve para encarecer el precio en la subasta.
Con una ágil dirección, fluida y llena de momentos de humor, sabiamente se huye del dramatismo, salpicando la historia de momentos muy divertidos ( la pelea entre Mitchum y Holden, esa súplica varonil que parece que concede más que ruega),y donde a Young se le reserva el contrapunto de mujer inteligente, dulce y paciente, que deberá lidiar con estos tres niños, el de verdad más estos dos hombres-niño, a los que deberá domar con sabia mano izquierda.
Las escenas finales del ataque de los indios, es la única concesión al dramatismo que ejerce de contrapunto en este hermoso y cálido film. Que la disfruten.
Izeta
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow