La I Guerra Mundial no solo dejó un alto costo humano (cerca de 10 millones de víctimas mortales y 20 millones de heridos y discapacitados), sino también una crisis económica que afectó al mundo entero. Argentina no fue ajena a estos hechos y los trabajadores rurales se vieron seriamente afectados por la arbitraria, y muchas veces injustificada, reducción de las condiciones laborales, las bajas en el precio de la lana que exportaban hacia Manchester y, entre otras cosas, los reiterados despidos sin explicación alguna.

Las organizaciones sindicales anarquistas: la FORA (Federación Obrera Regional Argentina) y la Sociedad Obrera de Río Gallegos, intervinieron entonces… y sucesivas huelgas comenzaron a darse para reclamar condiciones justas de trabajo. Muchos trabajadores fueron sindicalizados y concientizados de su derecho a la lucha… motivando esto que los estancieros (terratenientes) formaran fuerzas paramilitares (La Liga Patriótica) destinadas a reprimir sus acciones. En enero de 1921, el presidente Hipólito Irigoyen, envía a la zona tropas militares con el fin de “normalizar” la situación, y puestas al mando del teniente-coronel, Héctor Benigno Varela -un tipo sanguinario y muy obediente-, su accionar conduce a una huelga general… y entonces la clase sindicalizada habría de sufrir las consecuencias.

Osvaldo Bayer (1927-2018), historiador, anarquista y escritor argentino, en cuatro tomos publicados entre 1972 y 1974, nos legó un libro histórico-testimonial titulado, “Los Vengadores de la Patagonia Trágica”, en el que relata, con toda suerte de detalles, los acontecimientos de 1921.

El propio Bayer -en colaboración de Fernando Ayala y el director Héctor Olivera-, se encargaría de hacer la adaptación cinematográfica de esta historia, y el resultado ha sido, <<LA PATAGONIA REBELDE>>, una de las más impactantes películas que se hayan hecho en América Latina. La historia, magníficamente interpretada por Héctor Alterio, Luis Brandoni, Pepe Soriano, Federico Luppi y otros notables actores, resulta conmovedora y dramática y, sobre todo, muy precisa como registro de una de las mayores infamias que, contra la clase trabajadora, se haya causado en Argentina.

La historia arranca con el ajusticiamiento del coronel Zavala (Varela) por parte de un alemán, y quienes deseen saber quién fue, Kurt Gustav Wilckens, a quien los trabajadores argentinos consideran como un héroe, les recomiendo que vean el documental, “El Vindicador”, que, en 1989, y con algunos insertos de la película de Olivera, realizara Frieder Wagner con guion de Osvaldo Bayer.