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Voto de Natxo Borràs:
9
Aventuras. Romance Al estallar la Primera Guerra Mundial (1914-1918), Charlie Allnut (Bogart), un rudo capitán de barco con tendencia a la bebida, y Rose Sayer (Hepburn), una estirada y puritana misionera, huyen de las tropas alemanas en una ruinosa embarcación, con la que deben descender un peligroso río. Son, a primera vista, dos seres antagónicos, incompatibles, pero la convivencia y, sobre todo, las penalidades que tendrán que afrontar juntos para ... [+]
6 de mayo de 2009
4 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Una de las grandes obras maestras del género en que se movía mejor John Huston; el de aventuras, junto con la anterior "El Tesoro de Sierra Madre" y cuando aún no le había pasado en mente adaptar a Rudyard Kipling en esa alegoría anticolonial como es la grandiosa "El Hombre que Pudo Reinar".

"African Queen" no solo reune los alicientes necesarios de una buena película de aventuras sinó que también tiene toques de comedia y romance. Este último detalle se destaca a modo de sonoro beso después de un fuerte abrazo posterior a una situación límite en que se ven asediados la fugitiva pareja protagonista; Rose Sayer (Katharine Hepburn) y Charlie Allnut (Humprey Bogart), capitán de un pequeño bote mercante bautizado como la "Reina de África", que auxilia a tan desesperada dama, devota metodista que tiene que huir de la Misión tras la muerte de su hermano Samuel (Robert Morley). Rose y Charlie, río abajo, tendrán que soportarse aparte de esquivar las balas alemanas (la acción se situa en la Primera Guerra Mundial), cruzar por devastadores y violentos rápidos, o a aguas más chichas con hipopótamos y cocodrilos al Sol en espera de alimento, así como nubes incordiosas de mosquitos y sanguijuelas ocultas en laberínticos y espesos cañaverales.

La elección de la pareja protagonista es lo mejor que ofrece de este gran clásico. Y es curioso ya que en 1950 ya no se podían considerar una pareja muy atractiva en el estrellato hollywoodiense (a la Hepburn se le notava la madurez de cuarentona reprimida, y Bogart ya pasaba de los cincuenta, pero el glamour seguía allí con la biblia en la mano y el whisky desechado). Pero el director de "La Jungla del Asfalto" pensó que valía la pena en llevar a cabo un proyecto que llevaba más de treinta años pululando en busca de adaptadores fieles. Y no se escatimó en gastos. Contaba con el valor de la veteranía de dos grandes actores y el resto era pan comido.

Clint Eastwood realizaría en 1990 "Cazador Blanco, Corazón Negro" una visión algo libre pero veraz de la obsesión y amor que sintió John Huston por África; en especial por las cacerías, y la relación con los actores y equipo antes de llevar a cabo un ambicioso rodaje en el corazón de la jungla.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Natxo Borràs
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