Habrá quien piense que "Cadena de favores" tiene un cierto tufillo a telefilme melodramático. Estaría de acuerdo, si no fuera porque la calidad interpretativa de esta película no es para nada mediocre. Al contrario, cuenta con un trío protagonista increíble. Desde Haley Joel Osment, dando vida a un niño más maduro de lo que parece a causa de su vida familiar, pasando por un Kevin Spacey que cambia radicalmente de registro, hasta una sorprendente Helen Hunt (no recuerdo en ella un papel tan notable desde la oscarizada "Mejor imposible").
Ciertamente en algunos momentos puede encasillarse como la típica historia de hijo que intenta ayudar a su madre, pero el argumento convence gracias a la investigación paralela llevada a cabo por el periodista y, sobre todo, al inesperado final.
Mi nota: 8,7