Perdonar por la longitud de esta crítica, pero esta serie necesita una presentación ya que su primera impresión es muy distinta a lo que en realidad es.

La verdad es que viendo cualquier tráiler te echa bastante para atrás. La primera idea que se te viene a la cabeza que Pendleton Ward se le ha ido la cabeza con esta animación, pero la animación es solo una mínima parte de lo que significa esta serie. Si no llegar a ser por el vídeo que le dedico el canal “La zona cero” no le hubiera dado una oportunidad.
Sería injusto transcribir aquí toda la investigación y trabajo que le dedico Chucho Calderón en esta crítica, por lo que te recomiendo que veas su vídeo. Yo no lo consideraría spoiler ya que esta serie no tiene una trama en sí, y lo importante son los diálogos y los temas que se tratan por lo que puedes ver el video antes como después de la serie. Aquí solo realizaré algunos apuntes.

The Midnight Gospel, cuyo protagonista es Clancy es un presentador de podcast espacial que realiza entrevista a través de su simulador a seres de otros universos, pero en realidad estos seres son representaciones de los invitados del podcast “The Duncan Trussell Family Hour” del cómico Duncan Trussell y Clancy es el propio Duncan. En este podcast se tratan temas como la meditación, el budismo y como enfrentarse a la muerte, temas que se vuelven más livianos gracias a Duncan pero sin quitar la importancia a los mismos ya que él ha pasado por momentos duros como un cáncer y muerte de familiares y gracias a la meditación ha sido más llevaderos estos procesos.
¿Cómo logran alcanzar esa simbiosis entre un medio y otro? Lo más fácil sería explicando con un ejemplo. El primer episodio el entrevistado es el presidente de un mundo invadido por zombies, pues en realidad es el Dr. Drew hablando sobre su punto de vista del uso de las drogas. La animación es un apoyo simbólico de la conversación que está teniendo Duncan y Drew, siendo los zombies la representación de las personas que sufren los efectos de los alucinógenos. Otros invitados son el escritor Jason Louv, la funeraria Caitlin Doughty, el exconvicto Damien Echols o la propia madre de Duncan. La serie pasa constantemente de la animación a la realidad, ya que se han tomado clips reales del podcast pero también se han añadido nuevos audios para que se difumine los límites de uno y otro. Por eso a veces uno de los personajes le agradece a Duncan y Clancy contesta que quien es ese Duncan. Hay episodios que el protagonista será Duncan y otras veces lo será más Clancy.

Después de acabar con esta larga presentación voy a tratar mi opinión de esta serie. En el momento de escribir esta crítica, están sucediendo momentos duros en mi país y por desgracia me han afectado personalmente. Por lo que los temas que trata la serie me interesaban o incluso necesitaba, por si podía conseguir algún tipo de consuelo. Pero no ha sido así en mi caso y puede que sea mi culpa por pedirle demasiado. Lo cierto es que esta serie es muy subjetiva ya que Duncan aporta mucho de sí mismo y puede que algunos se sientan identificados o no con su punto de vista. Puede que los consejos que da sobre la meditación y como aceptar la muerte les resulte útiles, pero como he dicho antes no ha sido mi caso ya que soy bastante ignorante sobre la meditación y tengo otra mentalidad sobre lo que significa la muerte. Pero eso no quita que no me haya emocionado cuando hablaban sobre ella y como esta le ha afectado en su vida o tenía su conversación con su madre.
Respecto a la animación, como he dicho en otras críticas, es mi género favorito. Y me encanta cualquier innovación o cualquier idea que busque enriquecer este medio. Es la primera vez que veo un podcast animado, por lo que la idea me ha encantado y la realidad es que me sorprende el equilibrio que existe entre el podcast y la serie. Es cierto que a veces su animación se vuelve tan alocada que me hizo perder la atención al diálogo, pero solo sucede en momento puntuales. Creo que su último episodio es donde mejor se manifiesta el equilibrio de ambos medios.

En conclusión, es una serie que depende mucho del espectador ya que no todo el mundo acepta esta animación tan surrealista y a otros no le gustará los temas que se tratan en la serie. Por lo que es muy difícil recomendarla sin conocer a la persona a la que va dirigida. Lo que puedo decirte que es un producto único en su especie y puede que por su originalidad te de una razón para verla. Pero para ser sincero lo que más me ha gustado es como Duncan ha logrado abrirse para los espectadores y como ha logrado aportar tanto de sí en ella, en parte gracias a este aspecto fue lo que convenció a Pendleton Ward a volver animar y la verdad es que se echaba de menos su formar de trabajar en el medio.