John Rambo ha vuelto, todos sus seguidores y admiradores están de enhorabuena en esta IV y magnífica entrega. Una vez más, Rambo es requerido para una nueva misión de rescate en la jungla de Birmania. Allá tendrá que luchar contra un ejército Birmano cruel y sádico, para liberar un grupo de médicos con la ayuda de una partida de mercenarios.
La película no engaña y supera con creces todas las expectativas, ya que el baño de sangre está asegurado. Vemos un Rambo en estado puro, silencioso, básico, primitivo, amargado, solitario y brutal con sus enemigos. No es un film apto para todas las sensibilidades ni para estómagos sin curtir, ya que contiene escenas impactantes y demoledoras, como la separación de extremidades del cuerpo humano y autenticas carnicerías que no son siempre bien asimiladas, por más que de una película se trate.
Resumiendo: Buena película para los incondicionales de films de acción.