Y además, muy guapa. Quien me conozco ya sabrá mi debilidad desde que era un crío por esta chica, ya cincuentona pero aún de buen ver. Ella es ya motivo para verla. Otra cosa distinta es la película en sí. La verdad es que "Pensamientos mortales" tenía todos los ingredientes para funcionar como una buen thriller de intriga. El planteamiento recuerda mucho al de "Alma en Suplicio" de Michael Curtiz, pero al igual que ésta, acaba equivocando el paso, con la diferencia de que Alan Rudolph podía haberse enmendado en el último momento, cosa que no hace. Aquí por lo menos se centra en el homicidio sin melodramas innecesarios. De hecho, apostaba que la calidad de este trabajo se desvelaría en los últimos cinco minutos, cosa que efectivamente pasa. Encima a este relato le falta tensión, una investigación y hasta realismo. En cambio, Rudolph se pierde en problemas familiares. Ni por un momento existe el riesgo de que las cojan. Por si fuera poco, el planteamiento venía como anillo al dedo para lo que digo en el SPOILER, cosa que no sucede.

Lo malo que tiene es que la intriga se acaba estancando. En realidad, toda la historia nos es contada por Cynthia (Demi Moore) y en ella todo es perfectamente coherente. Es cierto que puede ser falso pero también cierto. Que sea una cosa o la otra dependerá del criterio del guionista. Ni siquiera conocemos la opinión de la otra implicada, Joyce (Glenne Headly). Pero peor aún es que tal y como está, las pistas que aparecen no tienen la más mínima importancia. Da igual que ella tirara el cutex, que guarde la pistola o que limpie la furgoneta (SPOILER). En fin, no es gran cosa pero al menos hay una buena idea y un gran reparto. Bruce Willis, que está estupendo, Demi Moore, que realiza una gran interpretación y que se ve que la gente le tiene envidia porque sino no se explica la tirria que despierta, Glenne Headly, que no está mal y el siempre eficaz Harvey Keitel. Incluso podemos ver a un Bruce Willis y a Demi Moore, matrimonio en aquellos años, por primera y única vez, si no me equivoco, compartiendo película. No salen mucho juntos, pero se nota la química que tienen.