Camino a la libertad está basada en la historia real sobre la fuga de un grupo de prisioneros de un terrible gulag soviético. La odisea de unos hombres que atravesaron a pie varios países asiáticos huyendo de las atrocidades del comunismo. Recorrieron más de 6000 kilómetros a pie pasando toda clase de calamidades. A pesar de la escasez de comida y agua y de las durísimas condiciones climatológicas, la fortaleza física y mental de los protagonistas hace que consigan superar las adversidades. Ayudándose mutuamente y permaneciendo juntos lucharán por conseguir la ansiada libertad.

Una vez más Peter Weir vuelve después de varios años en el dique seco y nos regala una sobrecogedora historia de superación rodada con sumo gusto como es habitual en él. El director vuelve a contar con su director de fotografía habitual Russell Boyd, para mostrarnos los bellos e inhóspitos parajes en los que se desarrolla la huida. En el reparto destaca la presencia de Jim Sturgess y sobre todo la de un sorprendente Colin Farrell. Ed Harris nos regala otra excelente actuación aunque me llama la atención verle en una película como ésta que denuncia los horrores del comunismo, siendo como es muy izquierdista.

Aunque no estemos ante una obra maestra sí es una buena película, muy bien realizada y con la duración justa. Porque también es verdad que al final se hace un poco pesada.