Lamentablemente pareciera ser que en materia de comedia en Hollywood no podemos aspirar por estos días a algo más de lo que ofrece "Buenos vecinos 2" (2016), ni siquiera a los disparates de Seth Rogen con James Franco, quienes junto a sus secuaces tienen un estilo propio para muchos "de culto".

Acá desde el primero al último minuto hay un humor para adultos, no necesariamente gracioso, ácido más que negro y con diálogos a ratos impresentables y burdos. Así y todo, hay varias situaciones que provocan la mueca y llaman la atención por su peculiaridad más que por su mérito de gracia.

"Buenos vecinos 2" desilusiona y el grado varía entre poco y bastante. Su irregularidad no sopesa con las figuras que asoman en su lista y sus recursos son tan agotadores como la insistencia majadera para que Zac Efron exhiba sus abdominales como si estuviera en sitcom de trasnoche de clase B.

Las segundas partes nuevamente no dan el ancho y eso que en teoría material había, partiendo porque la primera parte no era ni tan brillante como para hacer una continuación, pero junto a esta luce por lo menos recomendable.

Recomendación:
Débil. Olvidable. Una innecesaria secuela que no cuaja.

=Cité de Lord Buyinski= www.buyinski.wordpress.com