Crítica escrita tras haber visto la primera temporada completa.
A algunos les puede echar para atrás que el enfoque de esta serie de ciencia ficción sea juvenil, con todos guapísimos y muy limpios aunque estén en el bosque todo el rato, pero la verdad es que no se queda solo en eso, y merece la pena verla. No solo no es ñoña ni se centra en los amoríos de estos chavales, sino que los personajes están bien desarrollados. Aunque, pensándolo bien, hemos tenido ya varias sagas juveniles en el género que han estado bastante bien, como “Los juegos del hambre” o “El corredor del laberinto”, entre otras.
Clarke, la protagonista, tiene una gran fuerza a la hora de tomar decisiones y enfrentarse a todos los problemas. Es fácil identificarse con ella y que nos preocupe lo que le pasa.
Todas las tramas tienen su interés, en esta sociedad futurista en la que los 100 jóvenes desterrados a la Tierra forman sus propias reglas, empezando porque no hay reglas. Sus rencillas y formas de actuar sin leyes ni adultos, no dejan de recordarme a la estupenda historia de “El señor de las moscas”.
Para mantenernos enganchados con facilidad y poder hacer muchos episodios, tenemos a los adultos conspirando en el arca, para aportar variedad a todo lo que les pasa a los muchachos. Y no faltan los misterios en plan “Perdidos” (independientemente de que aquí esté también Henry Ian Cusick), con la diferencia de que “Los 100” es infinitamente más fácil y digerible para todo tipo de público.
Se plantean muchos dilemas morales sobre el bien común cuando la Humanidad está a punto de extinguirse. Tiene momentos de intensidad dramática que permiten a los actores lucirse.
En cuanto al ritmo, es una serie en la que sí pasan cosas con frecuencia y sus capítulos son cortos. En lo que respecta a esto, tiene mucho que enseñarle a series mucho más prestigiosas para la crítica (“El cuento de la criada” o “Homeland”, por poner solo dos ejemplos)
Además, tiene la capacidad de no repetirse e incluso de ir mejorando según avanza, incorporando interesantes elementos como los segadores, así como mostrando la interesante evolución de personajes como Marcus o Murphy.
Es también muy adictiva dentro de su relativa sencillez argumental. Tengo clarísimo que voy a verla hasta el final porque es de las buenas.
Al final me parece mucho mejor de lo que me estaba esperando e incluso de lo que parece al principio.