Haz click aquí para copiar la URL
España España · L'Olleria ( Valencia )
Voto de Grijander:
8
Drama Carlos es el sastre más prestigioso de Granada. Un hombre respetable. Sus pasiones son el trabajo y sobre todo la comida, pero no come cualquier cosa: se alimenta de mujeres desconocidas, con las que no tiene ningún vínculo emocional. Esa situación cambia el día en que conoce a Nina, una joven rumana que busca desesperadamente a su hermana gemela, que ha desaparecido hace unos días. (FILMAFFINITY)
14 de mayo de 2014
4 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Caníbal adapta una novela de Humberto Arenal en la que el argumento no requiere demasiada explicación cuando se lee el título.

Manuel Martín Cuenca dirige Caníbal y su trabajo es casi insuperable. El director almeriense nos presenta la mente del psicópata en un escáparate totalmente hermético. Sigue a su protagonista a sol y a sombra, sin descanso, pero deja que sea el espectador quien trabaje. Uno de los aciertos de Martín Cuenca es el de hacer una película inteligente a base de hacer pensar a quien la ve. Él no juzga, no ofrece datos del pasado del protagonista, no lo hace interactuar con demasiada gente; simplemente se limita a que veamos su vida, que no es poco, e intentemos adivinar qué es lo que pasa por esa mente tan compleja o, quién sabe, puede que tan simple. El trabajo con las cámaras, así como la iluminación, se convierten en dos actores importantísimos en la función, presentándose a cada escena con gran protagonismo. A mí, personalmente, lo que más me ha gustado de Caníbal es cómo Manuel Martín Cuenca consigue que dudes de aquello que dabas por sentado en la película; es algo que consigue sin recurrir a cháchara inconsistente ni a giros forzados, sino que para lograr tal fin, lo único que hace es esperar, hacer que esperes a la película al mismo tiempo que ella te espera a ti.

Antonio de la Torre es un monstruo, no voy a descubrirlo yo ahora. El fabuloso actor malagueño es uno de los más capacitados de su generación, lo que viene a significar, dadas las circunstancias, que es de los mejores de la historia de España. Aquí, su estremecedora interpretación hace que no puedas apartar la mirada intentando escudriñar en lo inescrutable de un personaje tan perfectamente definido por parte de Manuel Martín Cuenca como entendido por Antonio de la Torre. Esa aparente simplicidad, bajo la que se esconden capas y capas de misterio y de matices, hacen que el protagonista sea un personaje dificilísimo de interpretar, salvo si eres un bestia como de la Torre. Olimpia Melinte, pese a que tiene delante una de las mejores interpretaciones masculinas del cine español en años (curioso, o no tanto, siempre en papeles de villanos) no desentona. La actriz rumana consigue plasmar con su trabajo todos los tonos que necesita su personaje para no ser arrastrado por el torbellino que es Antonio de la Torre.

Resumiendo: Caníbal es una película sublime. Una obra maestra, sin duda. Una experiencia que no dejará indiferente a nadie. Oscura, turbia, angustiosa, fría y calculadora. Todo eso sin dejar de ser sensata, inteligente y conmovedora. Brillante.
Grijander
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow