Haz click aquí para copiar la URL
España España · Barcelona
Voto de Jaime Flores:
7
Drama Australia, 1926. Un bote encalla en una isla remota y a su encuentro acuden el farero Tom Sherbourne y su joven esposa Isabel. En el interior del bote yacen un hombre muerto y un bebé que llora con desesperación. Tom e Isabel adoptan al niño y deciden criarlo sin informar a las autoridades. Todo se complica cuando descubren que la madre biológica del bebé está viva. (FILMAFFINITY)
30 de octubre de 2022
Sé el primero en valorar esta crítica
Derek Cianfrance, a quién no tenía el gusto de conocer, muestra una sensibilidad oceánica, nunca mejor dicho. La película está hecha con un gusto exquisito y un tacto formidable, para ello no le importa detenerse en lo que cree que debe detenerse ni ir al paso al que quiere ir, aún sabiendo que la podrán acusar de aburrida y excesivamente melosa.

No era fácil porque semejante argumento podría haber caído en el ridículo fácilmente. Algunos por aquí así lo aseveran, yo no estoy de acuerdo pese que, para mí, sea un producto excesivamente sentimental, incluso almibarado. Eso no quiere decir que no reconozca su valía dentro de su género ni que no sepa apreciar que el director ha ido más allá, tanto en lo que respecta al prólogo, pausado y delicioso, como la aparición del tercer vértice en el asunto, que encaja a la perfección. A propósito, "La luz entre los océanos" profundiza en los tres personajes principales hasta el punto que llegas a comprenderlos a todos, por mucho que actúen de forma imperdonable.

De la fotografía no hace faltar hablar, sólo hay que verla y gozarla, como de cada uno de los lugares en los que sucede la acción y de los planos que el director ha rodado, siempre con esa luz presente entre los océanos y también entre los personajes. Por su parte, el reparto luce pletórico. Michael Fassbender construye un hombre hecho a su medida, alguien a quién vemos muerto en vida desde el principio y a quién Alicia Vikander devuelve a la vida y, también, a la muerte. El triángulo lo cierra Rachel Weisz, a mi parecer la mejor de aquí, ya que parte de un personaje con miga pero ella lo engrandece con su talento y su rostro perfecto para el cine. También son merecedores de halagos el discreto Garry McDonald y la pequeña Florence Clery.

Pausada, trágica y absolutamente clásica, "La luz entre los océanos" bien podría ser un cuento ancestral sostenido de padres a hijos. Como película, es una conmovedora historia sobre tres personas a las que la vida les sacude, les sitúa en encrucijadas muy concretas y, ellos, como tres trozos de un mismo espejo roto, actúan mirando por sí mismos, únicamente empujados por el sentimiento de supervivencia frente al dolor. El espectador será el que decida con quién se queda, quién les representa más y cómo hubiesen actuado ellos.

PD: cuidadito con las sinposis, que en ocasiones como esta matan cualquier ápice de sorpresa.
Jaime Flores
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow