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Voto de Vivoleyendo:
8
Drama Setsuko se siente desgraciada al lado de su marido, un ingeniero alcohólico y sin trabajo. Ella estuvo siempre enamorada de Hiroshi, aunque nunca llegaron a prometerse, porque él emigró a Francia. Ahora, que ha regresado a Japón, la hermana de Setsuko intenta unirlos de nuevo. El único problema es que ella también está secretamente enamorada de él. (FILMAFFINITY)
10 de marzo de 2010
26 de 28 usuarios han encontrado esta crítica útil
Posguerra en Japón. Lo antiguo y lo moderno paseando por incomparables paisajes y viviendas donde susurran los espíritus del pasado y los aires del presente. Una simbiosis cultural de admirable armonía. Anuncios de Coca-Cola, luces de neón, locales con exóticos nombres occidentales, algunas casas decoradas al estilo europeo. Sin desentonar con los etéreos apartamentos de puertas correderas, mesas bajas, mobiliario funcional diseñado para los exquisitos modales japoneses, y paneles de papel en lugar de cristales, que translucen una luz tamizada y suave.
A un paso de esta mezcla, templos que podrían haber surgido de la tierra hace eones, con esa arquitectura grácil, atemporal, tan sumergida en el paisaje, que la línea entre lo natural y lo artificial se diluye.
Dos hermanas radicalmente diferentes. Setsuko, la mayor, tradicional, prudente, discreta, diligente. Soportando estoicamente un matrimonio desgraciado. Mariko, la menor, soltera, inquieta, habladora, descarada, algo infantil en sus maneras, impulsiva, divertida. Setsuko viste quimonos, tiene ese porte de dama nipona delicada y entrenada para dominar sus reacciones, y siente predilección por los monumentos ancestrales. Mariko viste a la europea, se peina a la moda, fuma cigarrillos, bebe alcohol de vez en cuando en el bar de su hermana, en el que trabaja. Dice lo que piensa sin contenerse, reacciona según le dicta su instinto, y le desagradan las cosas antiguas.
Setsuko regenta un bar para salir a flote, ya que su marido no tiene trabajo. Pero la fuente de sus problemas surge de más hondo, de la infelicidad de una pareja que no se ama.
Un amor de juventud perdido ronda y espera a Setsuko, con toda la paciencia del mundo, sin prisas, porque cuando se ama de veras el precio se paga con gusto aunque sea muy costoso y muy desalentador. Pero Hiroshi quiere pagarlo. Y Mariko quiere ayudar. Lo malo es que Setsuko tiene que superar muchos obstáculos.
Un matrimonio en ruinas, una hermana joven e impetuosa que presta su inestimable apoyo, un enamorado paciente, días de sol alegre y lluvias que se elevan por encima de las tribulaciones, y noches de suspiros de mujer y embriaguez de maridos fracasados que remojan las penas en el bar, ese sufrido confidente de las borracheras nocturnas.
Dos mujeres persiguiendo su destino, en un Japón donde despierta el optimismo que brota cuando los horrores recientes de la guerra se han retirado para su reposo eterno.
Ozu sabía cómo detener el tiempo y pintarlo mientras se deslizaba en sus bellas postales de la vida corriente.
Vivoleyendo
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