Sin ser una auténtica obra maestra hay que decir que me ha sorprendido gratamente por ser original, con ritmo y tierna. Narra como en medio de una guerra entre Alemanes y Soviéticos, dos francotiradores hacen su particular lucha jugando al gato y al raton. El reparto deslumbrante, en el que Harris hace un papel memorable, a su lado Law y Weisz cumplen con creces. La violencia de muchas escenas y el trato que hace de la propaganda y la difusión hacen que resulte real lo que cuenta. La ambientación, decorados y la banda sonora hacen de ella una gran producción a la altura de un gran film bélico de todos los tiempos, pero sin olvidar que se trata de una película simple de acción que se enmarca en plena guerra. Muy recomendable.