Cuando vi que Menkes y Albacete, responsables de películas como Más que amor, frenesí o Mentiras y gordas, eran los directores de esta comedia romántica, me replanteé seriamente el verla. Al final decidí hacerlo, al fin y al cabo su trama, la cual gira en torno a una mujer (Carmen Maura) que viaja hasta París con la intención de reencontrarse con un viejo amor, presagiaba una comedia de enredo para todos los públicos.

Pero el resultado es un tanto decepcionante. No tanto por el trabajo de sus actores (Carmen Maura podría haberla rodado con los ojos cerrados, lo que me lleva a alabar los ídem de su partenaire masculino: Alex Brendemühl) como por una puesta en escena ramplona o una trama que no da mucho juego. Tampoco los personajes ayudan a mejorar la percepción sobre la cinta (el de Brendemühl, por ejemplo, en lugar de encantador acaba resultando un tanto pesado).