La vida es bella

En su día, yo fui a ver esta peli al cine con la que entonces era mi pareja, y encima estaba enamorado, y encima no sabía exactamente que iba a ver. Así que a todo este cúmulo de factores se unió el hecho de ver una verdadera obra maestra, esto hizo que "La vida es bella" haya dejado su impronta en mi corazón, una huella indeleble para el resto de mis días.

Más allá de sensaciones o de significados personales, esta peli merece estar en todo lo alto para cualquier amante del cine, lo contrario es opuesto a alguien que pretende denominarse como cinéfilo.

La grandeza de esta película queda patente en la maestría con la que conduce al espectador, con tremenda inmediatez, de la lágrima al llanto.

Ambientada en un momento histórico terriblemente duro,es capaz de transmitir el mensaje de lo bello que es vivir, si se sabe como.

A mi parecer es la mejor película que he visto en mucho tiempo, como un padre sometido a la esclavitud en los campos de concentración nazi nunca pierde la sonrisa, aún habiendo cargado con grande cargas durante todo el día, para hacer a su hijo feliz y ocultarle la terrible visión del mundo en el que están viviendo. Película con un final triste y a la vez alegre, película realmente conmovedora y entrañable.

Ambas cosas. Es dificil encontrarle un "pero" a esta obra maestra, quizá un comienzo algo flojo que recuerda a italianadas del tipo "jaimito contra todos".

Tardé unos minutos en ver la puerta abierta de esta gran historia, pero una vez dentro, me atrapó y me sedujo, me hizo reir y llorar... como la vida misma.

Una de las películas más emotivas y dolorosas que se han hecho. Dicen que la esperanza es lo último que se pierde, y es lo que ésta te demuestra. Roberto Benigni interpreta a un padre que hace lo imposible para salvar a su hijo en un campo de concentración nazi. Con un excelente final que te toca en lo más profundo del corazón, "la vida es bella" te enseña que cuando todo es oscuro, siempre hay una luz al final del camino.