Chocolat

Me parece una película estupenda. Juliette Binoche sale guapísima, Alfred Molina borda el papel y Judi Dench rubrica un magnífico reparto.

El chocolate como metáfora de nuestras inhibiciones... Accesible y fácil de entender. Un cuento de hadas con alguna sombra, pero una película que se ve muy agradablemente, que sin ñoña resulta un sencillo pero efectivo canto a la tolerancia. Sabia elección de casting la de la protagonista, Juliette es un bombón muy dulce, nadie mejor que ella para el papel.

Una recomendación: no verla con el estómago vacío. O por lo menos, tener a mano un buen cargamento de comida. Si es chocolate, mejor.

Una experiencia formidable. Eso es lo que sentí al ver esta película por primera vez. Me sumí en un festival de emociones incontrolables, todos mis sentidos fluyeron al son de la historia. No era yo quien veía y escuchaba la película, fue ésta la que activó todos mis sentidos; haciéndome partícipe de la historia.
Si hasta mi tacto, olfato y gustó se excitaron con la dulce descripción de la elaboración chocolatera, mi vista y mi oído alcanzaron un estado de excitación placentera gracias a la ambientación, la fotografía, la narrativa la música festiva y para rematar la belleza de Juliette Binoche...

A nadie le amarga un dulce, y desde luego esta la película deja muy buen sabor de boca. Creo que no critica ni enaltece nada, simplemente utiliza el chocolate (aquí idealizado) como metáfora de tentación, placer terrenal (normalmente inofensivo).

Por otro lado me han encantado todas las interpertaciones, como cabe esperar de semejante grupo de actores, y la magnífica estética.

Muy recomendable, especialmente lo que pretende transmitir, sintetizado en el sermón final.

Lo mejor de la película: el chocolate. Da gloria verlo. Apetitoso. Irresistible.
La historia es entretenida. con toques de cuento de hadas y enseñanza de Carpe Diem.
Pero los protagonistas no convencen. No hay química en esa pareja.
Para verla una vez nada más.

Una película muy agradable de ver y se hace agradable no por la dirección que resulta ser normal y tradicional, nada en especial pero la película resulta entrañable gracias a la gran mirada y ternura de Binoche.

Me gusta y se ve bien, una película que tiene dos visiones, una primera película que resulta ser un cuento agradable y tierno en un pueblo de encanto con personajes reales.
La segunda película es una película real, un pueblo dominado por el cotilleo y la frustración de un conde que no deja vivir a nadie libre y sin control.

La película trata sobre el feminismo, la mujer libre, los derechos de la mujer a expresarse y dejar de estar sometida a una sociedad machista.

La verdad que me gustan las dos lecturas, veo con placer esa historia de un pueblo de ensueño y veo la crítica que la película propone.

No es que sea una obra maestra pero es la típica película que gusta en Hollywood, una música bonita y una historia que te deja un buen sabor de boca, es la película con muchas nominaciones y pocos premios, se la salva es Binoche.

Es curioso que se le nomine por este papel cuando por otros que ha realizado ni se le nombre en Hollywood, así es esta dichosa fábrica del cine.